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Los marineros de la flota del cerco bloquean el puerto de Vigo

Los manifestantes han quemado varios contenedores de basura y lanzado bengalas Coreaban consignas contra el reparto de las cuotas del jurel y la caballa.

Protesta en el Puerto de Vigo
Protesta en el Puerto de Vigo SALVADOR SAS (EFE)

El colectivo de marineros de la flota del cerco ha colapsado esta mañana el centro de Vigo y el puerto pesquero de O Berbés, cuyo único acceso permaneció cerrado durante horas. Los manifestantes también se concentraron frente a la sede de la Xunta en la ciudad, a la que intentaron acceder sin éxito. Durante el trayecto, los manifestantes han quemado varios contenedores de basura y lanzado bengalas, mientras coreaban consignas contra el reparto de las cuotas del jurel y la caballa.

La protesta, que comenzó de madrugada, provocó importantes retenciones en el tráfico en el centro de Vigo, ya que los marineros cortaron durante su marcha el túnel de Beiramar. La flota reclama un mejor reparto de la cuotas . El malestar del sector lo ha provocado una comunicación de la Secretaría General de Pesca instando a cofradías y armadores a que comuniquen la relación de barcos que quieren gestionar su cuota de las citadas especies

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Los primeros disturbios en Vigo se registraron a las seis de la mañana, con el bloqueo del acceso a las instalaciones del puerto pesquero y del tráfico en la avenida del Berbés, así como en los túneles de Beiramar. Los marineros, que portaban un ataúd de cartón y pancartas con consignas como Europa nos arruina y O cerco vai á ruina, se dirigieron después hacia la delegación territorial de la Xunta en Vigo mientras hacían sonar pitos y bocinas.

Numerosos agentes antidisturbios se concentraron frente a la delegación de la Xunta ante la llegada de los manifestantes. Una pequeña representación de los marineros pudo acceder al edificio, aunque no logró entrevistarse con ningún representante de la Consellería de Mar. Pasadas las 10 de la mañana los manifestantes han desbloqueado el tráfico en la zona y se han retirado al interior del Puerto de Vigo.

La mayoría de la flota gallega de cerco -107 de los 150 buques censados- acordó el pasado viernes en Portosín reclamar a la consellería un reparto de los cupos de jurel por buques, mediante un reparto lineal que asigne un número de kilos por cada tripulante con condiciones. Pero este acuerdo no aparece recogido en el comunicado emitido por la Secretaría General de Pesca, por lo que los marineros han acordado retomar el amarre iniciado a finales del mes de enero como medida de protesta.

No es la primera vez que la flota del cerco sale a la calle. En febrero, las pitadas en los puertos y las protestas a pie de calle provocaron cortes de tráfico en el mismo punto de la ciudad, mientras marineros de distintos puertos llevaban sus exigencias hasta Santiago. Solo en Vigo operan 33 buques de cerco, que dan empleo directo a 409 personas (13 de ellas, personal de tierra), y generan un volumen de negocio anual de 7,264 millones de euros.

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