El fiscal se opone a la recusación del exconsejero del Betis contra Alaya
La fiscalía considera injustificada la petición del empresario
La Fiscalía de Sevilla se opone a la recusación presentada por el empresario y ex consejero delegado del Betis Luis Oliver contra la magistrada Mercedes Alaya por su investigación sobre las cuentas del club de fútbol. Según el escrito de la fiscalía, no hay ninguna prueba de la falta de objetividad de la juez y sus resoluciones fueron confirmadas por la Audiencia Provincial de Sevilla. Alaya investiga la compra de acciones de Oliver a Manuel Ruiz de Lopera, una operación que la juez considera fraudulenta.
En su escrito de recusación, Oliver pedía que Alaya fuese apartada de la causa por su “enemistad manifiesta, interés directo o indirecto en la causa” y por su arbitrariedad y “falta de imparcialidad”. “Llega a conclusiones absurdas e irracionales (...) Muestra evidente de falta de imparcialidad y prejuicios, llevados al extremo incluso de establecer hipótesis sin lógica alguna ni fundamento fáctico que las sustente”, sostiene Oliver en su escrito. La fiscalía entiende que la recusación “adolece de importantes omisiones de resoluciones dictadas en la causa y de circunstancias acaecidas” en los últimos tres años y medio, entre otras, la “complejidad y relevancia” de otros sumarios que instruye la juez, como el caso de los ERE y de Mercasevilla.
Sobre el tiempo en el que la causa estuvo paralizada, la fiscalía recuerda que se debió a la “tramitación de los recursos previstos en la ley” ante la Audiencia, a la realización de un peritaje sobre la gestión de Ruiz de Lopera en el Betis y a los seis meses que la magistrada estuvo de baja médica.
Oliver, Lopera y otras ocho personas están imputados en dicha causa por un presunto delito societario en la gestión del Betis. Según los peritos judiciales, en las temporadas 1999 a 2008, sufrió un perjuicio económico de 17 millones de euros y, entre los años 1993 y 1998, de otros 12,4 millones.
Según la fiscalía, las afirmaciones o temores del empresario sobre la falta de imparcialidad y el interés directo o indirecto de la juez en el pleito “no se sostienen por no hallarse objetiva y legítimamente justificadas”. Además, lamenta que Luis Oliver, al hacer referencia a una presunta “enemistad”, no se haya referido a su condena a pagar una multa de 4.500 euros por llamar “nazi” y “loca” a Alaya el 26 de octubre de 2010 durante un acto con aficionados en una peña bética de Utrera (Sevilla).
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