La inclusión laboral, un reto pendiente

Los ayuntamientos de Bizkaia apenas contratan a personas con discapacidades. Esta es una de las conclusiones de trazo grueso que se desprenden del estudio realizado por encargo de Lantegi Batuak. En su trabajo, CIDEC, una entidad que desarrolla proyectos en el ámbito de la formación e innovación social y con un amplio bagaje en investigaciones en el mundo de la discapacidad y el empleo, constata que solo el 12,5% de los ayuntamientos analizados contrata directamente a alguna persona con discapacidad. Sin embargo, la contratación indirecta de servicios, a través de los centros especiales de empleo, genera en Bizkaia más de mil oportunidades laborales.

El estudio, el primero de estas características que se realiza a nivel estatal, recoge datos facilitados por un total de 42 municipios que en su conjunto aglutinan al 51% de la población de Bizkaia. Como dato de referencia se constata una tasa de desempleo del 22,6% entre las personas con discapacidad. Esta cifra se ve condicionada por el bajo nivel de actividad del colecfivo ya que de las 25.000 personas con discapacidad que hay en Bizkaia solo están activas 10.000 y demandan un empleo, un 41%. La hipótesis apunta que a una mayor tasa de actividad, el porcentaje de desempleo entre las personas con discapacidad en Bizkaia sería sensiblemente más alto.

La presencia de Lantegi Batuak en Bizkaia, unida a una bajísima tasa de actividad a las personas con discapacidad intelectual conlleva una "engañosa tasa de paro" del 18,4%, similar a la del conjunto de la población. En el polo opuesto, las personas con discapacidad física presentan una mayor tasa de actividad y, con gran diferencia, el mayor índice del desempleo (31,4%). A su vez, las personas con discapacidad sensorial cuentan con elevadas tasas de actividad y una incidencia del paro menor (13,5%).

En el estudio también se destaca que la mayoría de los ayuntamientos opta por la vía de la contratación indirecta, que supone mil empleo en Bizkaia. Por lo tanto, se constata que "queda un largo camino que recorrer para que las personas con discapacidad accedan al mercado de trabajo y para que lo hagan en igualdad de condiciones.

Se constata una tasa de desempleo del 22,6% entre las personas con discapacidad

A su vez, aunque hasta ahora ha estado más ligado a la mejora de la accesibilidad y la eliminación de barreras físicas en las ciudades, el concepto de Smart Cites, o ciudades inteligentes, cada vez más en auge, puede suponer un revulsivo para una colaboración más estrecha entre entidades del tercer sector y los municipios. En el estudio se propone como "·una buena herramienta de apoyo" la acreditación que reconozca el trabajo realizado por los ayuntamientos y unos indicadores que midan el cumplimiento de los objetivos.