_
_
_
_
_

Inyectar fondos antes de preguntar

El diputado general de Bizkaia ha hecho otros gestos de muy mediáticos de apoyo al empleo

Pedro Gorospe

No es la primera vez que el diputado general de Bizkaia, José Luis Bilbao, se centra en una empresa simbólica que atraviesa problemas y decide hacer gestos muy mediáticos en nombre del empleo, o bien del deporte, en la provincia.

En 2006, la Diputación de Bizkaia compró por 15 millones de euros los terrenos y la maquinaria de Virtisú, una firma productora y comercializadora de papel, con el compromiso del entonces propietario, el grupo Jofel, de mantener la actividad y los puestos de trabajo. En 2013, Jofel se desentendió del asunto, entró en concurso de acreedores y la Diputación, que no alcanzó a ver que el negocio se encontraba en su ocaso, tuvo que pelear en los tribunales como un acreedor más.La institución foral informó al administrador concursal de su propósito de ceder su preferencia de cobro a los trabajadores, con el fin de que estos puedan recibir los salarios que se les adeudaban.

En 2009, Bilbao acusó a los socialistas, entonces apenas recién llegados a Ajuria Enea, de no evitar el cierre de empresas, y, ante los problemas que atravesaba la papelera Pastguren, ofreció y concedió un aval de 2,5 millones de euros. La firma entró en concurso poco después. La institución no se percató de que lo que necesitaba la compañía no era financiación, sino mercados, pero los acreedores sí olieron el dinero fresco, que les vino bien en el concurso.

Este año, ante el inminente cierre de Fagor Electrodomésticos, el diputado general ha vuelto a ofrecer dinero a los trabajadores, en esta ocasión de Edesa Fragor, para reactivar la actividad y mantener los empleos. Esta vez ha pedido al grupo que dé marcha atrás en el preconcurso, porque si no le iba a pasar lo mismo, si no sucede todavía.

En su condición de parte de Fagor, Edesa garantiza de forma solidaria toda la deuda bancaria derivada de la refinanciación de la cooperativa. Si tras la inyección económica foral se ejecutase el concurso, los bancos le quitaría todos los activos. El problema es que si ahora se separa a Edesa de su matriz, como ha pedido Bilbao, y se levanta el preconcurso de la primera, Fagor se queda con la misma deuda, pero menos activos para hacer frente a los acreedores.

Hay más. Bilbao prometió ayuda a los trabajadores de Reckitt en Güeñes en 2007, pero nunca llegó y se embarcó en otros proyectos que, en teoría, tenían que haber sembrado la provincia de cientos de empleos y que tampoco funcionaron. Fracasaron la fábrica de pisos modulares en Alonsotegi y el proyecto Puerta de Bilbao. Dos de los tres convenios que el diputado general firmó con el empresario Jabyer Fernández fueron declarados ilegales por la UE, pero el tercero sigue vivo e impagado. Fernández dejó de pagar más de 50 millones de euros de los vizcaínos.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

El pasado mayo, el mandatario foral salvó al Bilbao Basket con 5,2 millones, pese a eliminar las ayudas al deporte. El club recibió 1,5 millons y con el resto canceló su deuda con Hacienda. El Tribunal de Cuentas le recriminó después que compró una grada telescópica al club por el mismo precio que si fuese nueva cuando el equipo abandonó el BEC para ir a Miribilla. 

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Sobre la firma

Pedro Gorospe
Corresponsal en el País Vasco cubre la actualidad política, social y económica. Licenciado en Ciencias de la Información por la UPV-EHU, perteneció a las redacciones de la nueva Gaceta del Norte, Deia, Gaur Express y como productor la televisión pública vasca EITB antes de llegar a EL PAÍS. Es autor del libro El inconformismo de Koldo Saratxaga.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_