Trias presenta unos Presupuestos sin apoyo para aprobarlos

El Ayuntamiento de Barcelona presentó ayer el proyecto de Presupuestos para 2014 sin el apoyo necesario para hacer posible su aprobación. La situación no parece fácil para el alcalde, pues los grupos de la oposición reaccionaron de manera inmediata y se mostraron poco predispuestos a facilitar las cosas a CiU.

PSC, PP e ICV acusaron a Trias de no querer negociar las cuentas para el próximo año y de inclinarse a hacerlo mediante una moción de confianza, algo que no ha ocurrido desde 1979, año de las primeras elecciones municipales. Solamente Jordi Portabella, líder de Unitat per Barcelona, tuvo palabras de apoyo a los Presupuestos, cuya estructura calificó de “positiva”. El problema es que los dos concejales de su grupo, sumados a los 14 de CiU son insuficientes para que los Presupuestos salgan adelante, pues requieren un apoyo mínimo de 22 concejales.

Así las cosas, solamente los nueves ediles del PP podrían allanar el camino de las cuentas de Trías, aunque el portavoz popular, Javier Muelleras, ya advirtió que “la primera impresión no es positiva” y calificó los Presupuestos de “frívolos, irreales y ficticios”.

Las cuentas vigentes son una prórroga de las 2012, pues Xavier Trias tampoco encontró aliados hace un año. Ahora el Ayuntamiento rechaza que esa situación de bloqueo se vuelva a repetir, según explicó la teniente de alcalde de Economía, Sònia Recasens. La edil se mostró confiada en llegar a un acuerdo y apeló a la necesidad de aprobar las cuentas para que puedan realizarse las inversiones previstas.

Los Presupuestos ascienden a 2.574 millones de euros. Es un 11% más que en 2013 y se trata de unas cuentas “expansivas”, según Recasens, quien destacó que no habría subida de impuestos. El capítulo de inversiones aumenta hasta 426,3 millones, un 22,1% más que el año pasado, a lo que el Ayuntamiento suma otros 101,5% millones procedentes de la nueva gestión de aparcamientos. Se trata de un proceso que está en marcha y que, como mínimo no estará listo hasta el primer trimestre de 2014. Es decir, que hasta esa fecha el consistorio no podrá contar con un dinero que Recasens ya anunció que se destinará a una política “potente” de vivienda de alquiler. Toda la oposición reprochó que se hagan cuentas con unos ingresos que aún no han llegado.

PSC, PP e ICV dicen que CiU quiere forzar una moción de confianza

Recasens aseguró que eran unos Presupuestos “al servicio de las personas”, la misma expresión que empleó para referirse al alcalde Trias. El concepto más cuantioso del gasto corriente es el que se refiere a políticas de “bienestar comunitario”, que concentra 388,9 millones de euros (20,5%) del total, así como otros 232,4 (14,8%) destinados a servicios sociales y promoción social.

La principal partida de la inversión (250 millones de euros) se dedicará a obras de regeneración urbana, que comportarán la urbanización de nuevas calles y avenidas y otras obras emblemáticas, como la demolición del tambor de les Glòries, el inicio de la reforma de la avenida Diagonal o de la ronda General Mitre.