La Generalitat pagará este año sus deudas con los municipios

La Generalitat quiere poner el contador a cero en una de las deudas históricas que arrastra: los 600 millones que los Ayuntamientos catalanes tienen pendientes de cobrar. La vicepresidenta Joana Ortega prometió ayer que el Gobierno catalán saldará la deuda antes de fin de año. Con el pago, actualizado a agosto de 2013, el Ejecutivo quiere hacer borrón y cuenta nueva de un problema pendiente desde 2010.

Ortega hizo este anuncio en un escenario propicio: en el acto de elección de Miquel Buch (CiU), alcalde de Premià de Mar (Maresme) y presidente de la Asociación Catalana de Municipios (ACM) como nuevo presidente del consejo de Gobiernos locales. Además de la ACM, le acompañaba el presidente de la otra asociación municipalista catalana, la Federación de Municipios de Cataluña, el socialista Xavier Amor.

Las deudas se pagarán paulatinamente. Los municipios más pequeños, hasta 619 de los 947 Ayuntamientos catalanes, cobrarán “como mínimo” un tercio del importe de inmediato, según concretó la consejera. El resto se abonará de aquí a finales de año, para empezar 2014 solo con las deudas contraídas en el último trimestre del año.

El Gobierno catalán prevé pagar estas deudas con las transferencias del Fondo de Liquidez Autonómica (FLA). Aunque el Ejecutivo central reserva estos fondos para las necesidades inmediatas de tesorería, la Generalitat entiende que puede disponer de la transferencia para pagar esta deuda histórica. Ortega reclamó al Gobierno central que no ponga obstáculos para disponer del FLA.

La liquidación de la deuda contraída con los municipios no fue la única buena noticia que comunicó Ortega a los cargos locales. La vicepresidenta se comprometió a pagar las deudas con proveedores de los municipios que no han recibido ayuda del Estado. El Gobierno central transfirió un total de 2.757 millones a repartir entre todas las Administraciones catalanas para proveedores, pero hubo municipios que no se acogieron a las ayudas para no ver mermadas sus transferencias de recursos. Ortega se ofreció a ayudar a los Ayuntamientos que lo soliciten.

La Generalitat pondrá el contador a cero, pero solo con los municipios. Los entes provinciales prestaron a la Generalitat 250 millones de euros en 2012, que sirvieron para paliar parte de la deuda con los municipios, entonces de 750 millones. La Diputación de Barcelona llevó el impago al Tribunal Superior de Justicia. Pasa a la página 2

La deuda de la Generalitat con la capital catalana ha sido uno de los caballos de batalla de la oposición en el Ayuntamiento de Barcelona. El PSC, el PP, Iniciativa y Unitat per Barcelona siempre han criticado la laxitud y la falta de exigencia del alcalde Xavier Trias para reclamar los 235 millones de euros que le adeuda el Gobierno autónomo y que desde agosto transfiere el FLA al Consistorio. Los populares, incluso, creen que la deuda es aún mayor y la cifran en 362 millones a junio de este año.

Uno de los ejemplos de esa laxitud, critican desde la oposición, fue la forma como se cerró el convenio por el préstamo de 25 millones de euros para Spanair, en noviembre de 2011. La ciudad recibió como pago obras ya hechas por la Generalitat o comprometidas antes del desembolso para salvar la aerolínea. El PSC, de hecho, anunció en mayo que llevaría a la Generalitat y al Ayuntamiento a los tribunales, por considerar que el acuerdo era lesivo para los intereses de la ciudad. Ayer el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña aceptó a trámite el recurso contencioso-administrativo que busca dejar sin efecto el cierre del convenio con Spanair.

El líder socialista Jordi Martí decidió tirar adelante el contencioso, a pesar de que en junio se conoció que Trias buscaba replantear el cierre del convenio.