Cáritas advierte de que la pobreza se está “cronificando” en Euskadi

Cáritas Euskadi ha alertado esta mañana de la "cronificación" de la pobreza en el País Vasco, donde un tercio de las personas atendidas en 2012 llevan más de tres años asistidas por estos servicios, y del "desgaste" de la ayuda familiar que ha sostenido a los más afectados por la crisis. Las agrupaciones de las tres diócesis vascas han presentado hoy en sendas ruedas de prensa sus respectivas memorias, que reflejan que el número total de personas atendidas por esta organización ascendió a 47.556 en 2012, de las que 29.081 lo fueron en Gipuzkoa, 13.002 en Bizkaia y 5.473 en Álava, informa EFE.

La cifra de personas atendidas se ha estabilizado en Bizkaia, donde el dato es similar al del ejercicio anterior, mientras que Gipuzkoa ha experimentado un incremento del 20%. La situación empeora fundamentalmente por la duración de la crisis, que ha llevado a "cronificar" la pobreza de muchas personas, derivada del desempleo y el endeudamiento familiar, lo que se agrava por el "desgaste de sus redes de apoyo familiar y social".

El secretario general de Cáritas en Álava, Ramón Ibeas, ha explicado que existe "un problema familiar serio" porque el "colchón" que hasta ahora eran los abuelos y sus pensiones "está empezando a fallar". Ante esta situación, Cáritas ha ofrecido más de 30.000 respuestas de ayuda económica para necesidades básicas, en las que ha invertido más de 4 millones de euros.

La ONG ha invertido más de cuatro millones para cubrir  necesidades básicas

La prolongación de la crisis está afectando también al ánimo de las familias, principal soporte de los más necesitados, por lo que se ha detectado un "aumento creciente" de conflictos familiares y un "deterioro de la comunicación interna", lo que conlleva un mayor número de personas solas o "con una red de apoyo insuficiente" para hacer frente a su precaria situación económica.

Otra novedad contrastada en los servicios de Cáritas se refiere al origen de los atendidos, al aumentar el porcentaje de los nacionales frente al de los extranjeros. Por ejemplo, en Álava el 25,7% de los atendidos eran españoles, frente al 22% de 2011, mientras que desde el principio de la crisis se ha duplicado la cifra de personas autóctonas que han necesitado la ayuda de las diócesis.

De manera similar, en Bizkaia cada vez son más los ciudadanos comunitarios asistidos, el 46% en 2012, y menos los de fuera de la Unión Europea. Lo que no se modifica es la feminización de la pobreza; 58% de las atendidas el pasado año en Bizkaia y 61% de las de Álava fueron mujeres, mientras que en Gipuzkoa, aunque no se han ofrecido datos, se ha descrito a las mujeres solas con cargas familiares como uno de los perfiles paradigmáticos de la crisis.

En Gipuzkoa, el obispo José Ignacio Munilla ha destacado que Cáritas está detectando que existe un sector creciente de familias que hasta ahora pertenecían a la "clase media" que está necesitando de ayuda pero no quiere acudir a la asistencia diocesana porque lo considera "vergonzante". Por ello, Cáritas está estudiando vías, a través de "mediadores", para acceder a estas familias y poder ayudarlas.