El perro indignado por los recortes y la huella dactilar del abuelo ausente

Los policías antidisturbios forman una columna disuasoria, pertrechados con sus defensas. Frente a ellos, un perro solitario ladra. Es otra de las representaciones de la indignación -"que ha llegado hasta a los perros", según apuntó el vicerrector Antonio Ariño- ante el empeoramiento de la calidad de vida, ante los recortes presupuestarios, ante las rebajas salariales, ante los despidos. Es una fotografía captada en las inmediaciones del parlamento griego en 2011 por Pascal Rossynol.

Hay muchas otras imágenes impactantes en este tercera edición del festival Photón, que tiene lugar en varios escenarios de Valencia desde este lunes. Por ejemplo, la joven pareja que vive bajo unos soportales y por la mañana busca trabajo en los ordenadores de una biblioteca pública, retratada por Samuel Sánchez. O la fotografía de Luis Magan que recoge personas buscando alimentos en los contenedores, entre la basura arrojada por unos grandes almacenes, bajo la deslumbrante luz del escaparate.

Son fotografías incluidas en la exposición colectiva Crisis (hasta el 1 septiembre) que se puede ver en el claustro de la Nau Centre de Cultura de la Universitat de València. Una selección de imágenes de actualidad realizada por la decena de fotógrafos del comité de organización de este festival Photón, que cuenta con el patrocinio de la Fundación Cañada Blanch, entre otros, como Ayre Astoria.

Dentro, en una sala de la Nau, se exhibe Las fosas del olvido (hasta el 1 de septiembre), un trabajo de Eloy Alonso, que ha inmortalizado el trabajo de recuperación de la memoria en España. El fotógrafo captura cómo, por fin, los familiares de Parejo Lleó pudieron depositar sus restos arrojados a una fosa común junto a los de su mujer, tras ser identificado por el ADN como una víctima de la Guerra Civil. La investigación de Eloy Alonso partió de una ausencia familiar. De su abuelo sólo encontró la huella dactilar firmando su pena de muerte. "A veces, los condenados a muerte se negaban a firmar sus condenas como última protesta y les obligaban a untar de tinta su dedo pulgar para dejar constancia", apunta el fotógrafo.

Photon prosigue en la Sala Lametro (estación de metro de Colón), con una selección de cinco fotoperiodistas de distintas agencias internacionales como Manu Brabo, ganador del Pulitzer este año, sobre el conflicto en los países árabes, bajo el título Españoles en primera línea de fuego, estallido árabe (hasta el 13 de julio).

El Mercat Central de Valencia reúne Rodalies (hasta el 30 de mayo), con fotografías de prensa realizadas por José María Penalba y José Penalba, auténticos referentes imprescindibles en la historia de la fotografía de Valencia. 

En el IVAM continúa hasta el 2 de junio la exposición con imágenes de Enrique Meneses. En el Espai d'Art Fotogràfic se presenta la exposición ganadora de Gianluca Napoli, que obtuvo la beca Photon el pasado año.

Además, se han organizado proyecciones en al Nau hasta el sábado. El lunes se emitió la película documental Los ojos de la guerra, de Roberto Lozano, un alegato en defensa de los derechos humanos reconocido en el Festival Iberoamericano de Cine y Vídeo CINESUL, que se acerca a las guerras de Afganistán, Yugoslavia, Irak y Africa a través de la mirada de los reporteros guerra Gervasio Sánchez, David Beriain, Sergio Caro, Hernán Zin y Mikel Ayestarán. Lozano reivindincó el trabajo necesario de los fotoperiodistas.