El paro se eleva a una tasa del 29,19% y alcanza ya a 727.500 valencianos

Cuando parecía difícil que el mercado laboral valenciano fuera a peor, los datos de la Encuesta de Población Activa (EPA) hechos públicos ayer pulverizaron esa esperanza. La tasa de desempleo escaló en el primer trimestre del año hasta el 29,19%, dos puntos más que en el conjunto de España, y el paro alcanza ya a 727.500 valencianos, dos nuevos récords negativos. A pesar de ello, el consejero de Economía, Máximo Buch, dio vueltas a las estadísticas hasta encontrar en la evolución del aumento del desempleo una perspectiva positiva, según la cual los de ayer habrían sido “los mejores datos en los últimos cinco años”. Su afirmación fue recibida con sorna y protestas por los diputados de la oposición, que lo acusaron de “burlarse de los parados”.

La EPA ofreció datos preocupantes sobre la cobertura de los desempleados. Más de un tercio del total, 268.700 personas, llevan dos años o más buscando empleo sin éxito. Ello significa que han agotado el derecho a percibir la prestación y que solo tienen acceso, y no todos, a un subsidio de 426 euros.

La valenciana figura como la sexta autonomía con mayor tasa de paro, por detrás de Andalucía, Extremadura, Canarias, Castilla-La Mancha y Murcia. El crecimiento del desempleo en los tres primeros meses del año se sitúa en la media española (3,9%) y la subida interanual fue el tercero más moderados de España, dos de los argumentos a los que se aferró ayer Buch.

La tasa de paro juvenil (esto es, entre menores de 25 años), llegando al 55,7%, se situó dos puntos por debajo de la media.

La EPA confirma el derrumbe del sector de la construcción, que en cinco años de crisis ha pasado de representar el 14,5% de los trabajadores a solo el 6,6%. Por el camino ha destruido 212.600. El sector emplea ahora a 115.700 personas.

Torres, portavoz socialista, califica la situación de "insostenible"

Buch afirmó en las Cortes Valencianas, durante la sesión de control al presidente de la Generalitat, que la evolución del número de desempleados ha sido "la mejor de los últimos cinco años", lo que generó protestas y chanzas de la oposición. Según Buch, este año ha aumentado menos la cifra de parados que en ejercicios anteriores. Lo que en su opinión apunta una tendencia a “la mejora de la situación”. Pese a que reconoció que una tasa superior al 29% resulta “objetivamente mala”, insistió en que “el empeoramiento de la situación se modera”. Para apoyar sus afirmaciones, el consejero aseguró que el paro en la Comunidad Valenciana “se está comportando mejor que la media española”, con una destrucción de empleo menor.

El aumento del paro protagonizó en la Cámara autonómica buena parte de un debate que el presidente de la Generalitat, Alberto Fabra, en respuesta al portavoz de su partido, Jorge Bellver, inició explicando las bondades del sistema de formación profesional dual, que prevé las prácticas retribuidas de los alumnos en las empresas. El presidente cifró en 74.000 los alumnos de FP y dijo disponer de 450 becas con remuneraciones de 350 a 450 euros para la realización de un 50% de prácticas en las empresas. Con ese modelo, explicó, “habrá más posibilidades de que los alumnos encuentren trabajo en las empresas donde hacen las prácticas”.

“Sus políticas fracasadas nos han llevado a esta situación de emergencia”, le dijo el portavoz socialista, Antonio Torres, que calificó de “insoportable” la tasa de paro alcanzada. Francisco Toledo, también del PSPV-PSOE instó a Fabra a hacer frente al desempleo. “Tome decisiones”, le dijo.

También el portavoz de Compromís, Enric Morera, aludió a las cifras de desempleo y el diputado de la coalición Josep Maria Pañella acusó a Fabra de “no tocar tierra” al buscar excusas ante el problema. Pañella advirtió: “Dentro de cuatro días, uno de cada tres valencianos no tendrá trabajo”.

En respuesta a Pañella fue cuando Buch aseguró que, aunque el primero de este año es “un trimestre estacionalmente malo, eso no quiere decir que vaya a peor”. Más tarde, Mireia Mollà, también diputada de Compromís, indicó que el consejero "se burla de los parados".

La portavoz de Esquerra Unida del País Valencià, Marga Sanz, a su vez, identificó los datos de desempleo con la condena de amplios sectores de la sociedad valenciana a la miseria y le dijo al jefe del Consell: “Los 727.000 parados son las cifras del fracaso de su política”.

Para dejar más en evidencia que la lectura optimista de las cifras era patrimonio del Consell en solitario, la patronal autonómica Cierval señaló que los resultados de la EPA superan “incluso las previsiones más pesimistas”. El presidente de Cierval, José Vicente González calificó los datos de “muy malos”. González, que es también vicepresidente de la CEOE, mostró su preocupación debido a que las cifras corresponden a un trimestre en el que ha coincidido la Semana Santa, “que siempre crea empleo en zonas turísticas”.

La patronal advierte de que la Semana Santa cayó en el trimestre analizado

El pesimismo del presidente de Cierval se extiende a las posibilidades de un cambio de tendencia. “Es posible que el año que vienen podamos parar \[de destruir empleos\]“, dijo González, pero crear empleo no vamos a hacerlo”. Sobre el paro juvenil, no tuvo reparos en considerar que se trata de datos “dramáticos”. “Nos estamos cargando una generación”, indicó. La falta de financiación de las empresas está condicionando toda la situación, señaló el presidente de la patronal autonómica, que participó en unas jornadas en la Facultad de Economía de Valencia. “El primer problema es el paro, evidentemente, pero el paro viene producido por la falta de crecimiento y solo se crece cuando hay suficientemente financiación”, señaló.

Los sindicatos coincidieron con las apelaciones de los dirigentes de la oposición a que el Consell reaccione ante una “situación de emergencia”. El secretario general de UGT-PV, Conrado Hernández, consideró “horribles” los datos de desempleo y alertó del “aumento escandalosos” de los parados de larga duración.

Hernández criticó que Fabra y su Consell no quieran cambiar ciertas “políticas globales”, pero añadió: “Por lo menos tendrían que cambiar las políticas activas de empleo para intentar que la gente se pueda buscar mejor formación”.

Paco Molina, secretario general de CC OO-PV consideró “rotundamente negativas” las cifras y llamó la atención sobre la pérdida de empleo en el sector público. En su opinión, la situación es “más crítica” debido a los recortes del Gobierno valenciano en políticas activas de empleo, en protección social y en inversión. Se trata, concluyó, de una ecuación que “lleva a un empobrecimiento de nuestras personas y nuestras familias”.

Para Vicent Mauri, de la Intersindical Valenciana, los datos de la EPA son “peores” en el ámbito autonómico que en el resto de España. Eso es imputable, explicó a “la mala política del Consell, que desde hace 20 años no ha creado empleo en ningún ámbito industrial, en el campo o en los servicios públicos”.

“La reforma laboral servía para abaratar los despidos”, comentó Mauri. Según el dirigente de la Intersindical, este debería ser el momento de “sentarse a hablar sobre otras políticas sociales, económicas y laborales que creen empleo estable y digno” en el territorio.