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Gobierno y agentes sociales negocian a marchas forzadas el pacto del empleo

El Ejecutivo quiere firmar el acuerdo con sindicatos y patronal el miércoles

Lourdes Lucio
De izquierda a derecha, Pastrana, Griñán, Herrero y Carbonero en el acto de la firma del VII Acuerdo de Concertación Social de Andalucía, en noviembre de 2009.
De izquierda a derecha, Pastrana, Griñán, Herrero y Carbonero en el acto de la firma del VII Acuerdo de Concertación Social de Andalucía, en noviembre de 2009.ALEJANDRO RUESGA

Oficialmente, en la Consejería de Economía no hay urgencia alguna para cerrar cuanto antes un acuerdo con los sindicatos mayoritarios, CC OO y UGT, y con la patronal, representada por la Confederación de Empresarios de Andalucía (CEA), sobre empleo. Esta negociación es la columna vertebral del llamado pacto por Andalucía, una iniciativa difusa impulsada por el presidente de la Junta, José Antonio Griñán, sobre la que gira la agenda política de una comunidad sin grandes proyectos, por la falta de liquidez y de recursos, para acometer planes a medio y largo plazo.

Este pacto general descansa en el acuerdo sobre el empleo y sin él los avances en otros campos son muy difíciles. De ahí las prisas de última hora de la Junta, que no son ajenas a las reiteradas peticiones del Partido Popular para que Gobierno y agentes sociales presenten un documento. Los sindicatos dieron un plantón a la Junta, en víspera de la manifestación del 28 de febrero, Día de Andalucía, en estas negociaciones por entender que los textos que había sobre la mesa eran muy inconcretos.

Pero si la versión del departamento de Economía, Innovación, Ciencia y Empleo que dirige Antonio Ávila es que se sigue trabajando sin fecha, la realidad es que el acuerdo está prácticamente cerrado. Así lo aseguran los sindicatos UGT y Comisiones Obreras que estiman que la CEA —"como siempre", apostilla una fuente de la negociación— aprovechará una reunión prevista para mañana martes para incluir algunas cuestiones de última hora, algo que confirman desde la patronal.

Desde la institución que preside Santiago Herrero —quien no ha participado directamente en las negociaciones— se evita, por tanto, dar por cerradas las conversaciones hasta el martes.

Pese al silencio del Gobierno andaluz, las tres partes mantuvieron una reunión en la sede de la Consejería de Economía el pasado viernes para intentar "cerrar a marchas forzadas" el acuerdo, según admitió el secretario general de la UGT, Manuel Pastrana.

"Las negociaciones del acuerdo están en sus últimos momentos. Desde Comisiones Obreras creemos que es importante que lo firmemos lo antes posible", aseguró el secretario general de CC OO, Francisco Carbonero.

Estos contactos han seguido durante este fin de semana, para el miércoles se produzca la foto y la firma. El texto no llevará por nombre pacto por el empleo sino Acuerdo para el progreso económico y social de Andalucía, según las fuentes consultadas.

No será un texto con propuestas concretas, sino que remitirá a un desarrollo posterior. En el documento no se hace ninguna enmienda a la totalidad ni tampoco parcial a la reforma laboral, pese a que tanto los sindicatos como el Gobierno de coalición de PSOE e Izquierda Unida son muy críticos con esa regulación. De haber incluido una crítica explícita, la patronal no estaría en el acuerdo, se alega a modo de explicación.

Sí se ha incluido el compromiso de patronal y sindicatos para desbloquear la negociación colectiva con la intermediación de la Junta de Andalucía, un asunto que tendrá la "máxima prioridad", según UGT. “Hay un interés común de las partes para regular las relaciones laborales mediante convenio, porque si sigue avanzando la desregularización se producen también problemas para las empresas por competencia desleal”, afirma Manuel Pastrana.

Los sindicatos afirman que el documento incluye objetivos generales para que todos los demás acuerdos enmarcados en el pacto por Andalucía sigan esta guía, cuya prioridad total y absoluta es la creación de empleo. Según el Ministerio de Empleo y Seguridad Social, la comunidad alcanzó en enero pasado 1.102.398 desempleados.

Pastrana asegura que se trata de un texto "muy amplio" en el que además del objetivo de la creación de empleo, se apuesta por el mantenimiento de las políticas sociales en Andalucía y por la garantía de los derechos sociales recogidos en el Estatuto de Autonomía. También figuran medidas de reactivación económica que pasan por el impulso de nuevas actividades empresariales. Se recoge un compromiso para la planificación de los fondos europeos que recibirá Andalucía en el próximo periodo presupuestario (2014-2020). Según las estimaciones de la Junta, la región percibirá un cheque total de 7.637 millones de euros —sin incluir las partidas de la Política Agraria Comunitaria—, 1.063 millones menos de lo previsto, y 5.131 millones menos que lo ha recibido durante los últimos siete años.

El acuerdo también incluye un plan de empleo dirigido a trabajadores mayores de 45 años y a los más jóvenes.

El pacto que firmarán Gobierno, CC OO, UGT y CEA el próximo miércoles —si nada se tuerce— nada tiene que ver con el acuerdo de concertación que existe en Andalucía desde hace más de 20 años. La vigencia del actual acaba en diciembre de 2013, fecha en la que se empezará a negociar un nuevo pacto económico social. La principal diferencia con todos los anteriores es que no va a haber ninguna lluvia de dinero ni una inyección de recursos como la que tiene el acuerdo todavía en vigor que ha movilizado 19.825 millones de euros.

El presidente de la Junta, José Antonio Griñán, pretende que el VIII Acuerdo de Concertación sirva como "contrapunto" de la reforma laboral. Sus socios de Izquierda Unida, que por primera vez participarán activamente en su desarrollo, pretende también un giro en cuanto al número de participantes. IU quiere que las organizaciones de la economía social estén en la mesa, algo a lo que históricamente se ha opuesto la CEA.

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