Habidite cree vigente el tercer convenio que Bilbao le firmó en 2006

Habidite, empresa creada por Jabyer Fernández para la construcción de viviendas modulares, aún sostiene que uno de los tres convenios firmados en diciembre de 2006 con la Diputación de Bizkaia mantiene su “vigencia” y “absoluta legalidad”.

Así lo hace constar en una demanda aceptada por el Tribunal Superior de Justicia del País Vasco en la que, sobre la justificación descrita durante 78 folios, pide la nulidad de una resolución foral que destimó el pasado mes de julio la reclamación de incumplimiento de la empresa constructora.

En su exposición de motivos, Habidite mantiene como hilo argumental que la Comisión Europea nunca se ha referido al tercer convenio, suscrito en favor de la formación y la creación de empleo dentro del acuerdo marco de 2006, aún a sabiendas de su existencia.

Reconoce que se tata de un convenio “peculiar”, ya que fue firmado personalmente por José Luis Bilbao como diputado general de Bizkaia y sin atribuirse otra representación como ocurrió en los otros dos convenios en los que selló su compromiso como mandatario de Bizkailur, hoy conocida como Azpiegiturak.

Para la defensa de Habidite en esta demanda que exige numerosas comparecencias y pruebas periciales, el tercer convenio sigue siendo “válido y eficaz” ya que sobre su existencia no existe pronunciamiento en contra y la Diputación, recuerda en la petición, lo ha desestimado “mecánica e inmotivadamente”. De hecho, jamás fue incluido en el expediente remitido a Bruselas para el dictamen sobre las ayudas de Estado.

Nulidad del acuerdo

Habidite apela constantemente en su demanda a la indefensión y a los perjuicios económicos sufridos por el incumplimiento de este acuerdo.

Sostiene que la Diputación empezó a cumplir las condiciones del acuerdo —disponía mediante compras del 58% del terreno para asentar la fábrica en Alonsotegui— hasta que sin motivos conocidos se desentendió del proyecto en mayo de 2008, aunque el diputado general siempre dijo apoyar. Habidite recuerda cómo el Gobierno vasco le concedió una ayuda de seis millones a fondo perdido al tratarse de un proyecto “estratégico”, pero que no ha cobrado debido a la paralización. Por todo ello, Habidite ve un comportamiento “culposo” y “doloso” de la Diputación.