Los ‘mossos’ desalojan una oficina bancaria ocupada por la PAH
Frente a la protesta vecinal de Sabadell, los antidisturbios acaban cuatro días después con el encierro en el UNNIM
El desalojo estaba cantado. Tanto, que ante la anunciada llegada de los Mossos d’Esquadra, allí aguardaban más de un centenar de vecinos, solidarios ante la guerra perdida de Ahmed, de 33 años y con tres hijos, que encontró el rechazo de la entidad bancaria UNNIM al solicitar la dación en pago [la entrega de las llaves del piso a cambio de la anulación de la hipóteca], puesto que le reclamaba 4.000 euros, según relatan desde a Plataforma de Afectados contra la Hipoteca (PAH).
Los vecinos de la calle Sau en el barrio Torre-romeu (Sabadell) eran el escudo para la veintena de protestantes de la PAH, que ocuparon el banco desde el jueves por la noche y que lograron desactivar la funcionalidad de la entidad el viernes, por más que la entidad de UNNIM —según la PAH— exigiera su inmediato desalojo. No fue, sin embargo, hasta anoche a las 10.30. Un desahucio tenso y prolongado.
La ocupación se inició el jueves, noche en que los mossos entraron en la oficina para identificar a los protestantes, bajo un entorno pacífico. Una calma extendida hasta anoche, cuando ocho furgonetas antidisturbios —con la idea de desalojar la oficina para que el servicio de limpieza aderezara el banco, que pretendía abrir sus puertas esta mañana en un marco de normalidad— se acercaron al lugar. “Ante la resistencia vecinal, utilizaron los escudos para hacer una carga”, contaba un Albert, desde el lugar de los hechos; “aunque no se pasó a mayores, tras aparcar los furgones ante la puerta, procedieron a un desalojo que duró alrededor de una hora”.
Pero la historia no acabó ahí, puesto que sumaron vecinos —en el momento álgido se contaron hasta tres centenares—, e increparon a los mossos, y hasta les lanzaron agua desde el mismo edificio del banco. Tensión controlada, aunque le faltó un chispazo para ser algo más.
La PAH, lejos de rendirse, convocó para esta mañana (9.00), una concentración ante de la sede central de UNNIM, en Sabadell.
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