Suspenden un desahucio de una mujer que avaló a su expareja

Kutxabank ha suspendido el desahucio en Vitoria de una mujer por impago de su hipoteca, que había refundido en un sólo crédito con un préstamo para poner en marcha un negocio de fontanería del que entonces era su pareja, que no funcionó. Alrededor de doscientas personas convocadas por Stop Desahucios de Álava se han concentrado frente a la vivienda de la mujer para protestar por este desahucio.

Minutos antes de las doce del mediodía -hora en la que estaba prevista la llegada de la comitiva judicial- una patrulla de la Ertzaintza ha informado a los portavoces del colectivo de la paralización del desahucio, anuncio que ha sido saludado con aplausos y gritos de "Sí se puede" por parte de los manifestantes.

Fuentes de Kutxabank han explicado a Efe que este desahucio no iba a suponer el desalojo de la mujer porque ésta desde hace tiempo vive con su madre y han aclarado que la paralización del mismo para seguir negociando ha tenido lugar esta mañana después de que el alcalde de Vitoria, Javier Maroto, y el presidente de la entidad bancaria, Mario Fernández, hayan hablado por teléfono.

El portavoz de "Stop Desahucios" de Alava, Mikel Gómez, se ha felicitado por la paralización del desahucio ante los medios de comunicación pero ha expresado su "descontento y enfado" porque la suspensión se haya comunicado "a última hora".

La deuda pendiente es de 200.000 euros más los intereses

Gómez ha asegurado que la suspensión del desahucio no se ha conseguido por las gestiones "de ultima hora" de Maroto, sino por "el trabajo de la asociación y toda la solidaridad de la ciudadanía de Vitoria que ha forzado a Kutxabanak a paralizarlo".

"Stop Desahucios" había pedido a la entidad la condonación de la deuda y la concesión de un alquiler social durante cinco años para la mujer, una oferta que el banco rechazó. Ayer por la tarde Kutxabank se avino a negociar unos pagos "más flexibles" de la hipoteca, algo que habrá que negociar a partir de ahora, según ha precisado Gómez.

Por su parte, Haimar Sáenz de Buruaga, otro de los portavoces del colectivo, ha anunciado que el miércoles próximo, día 16, hay otro desahucio programado en Vitoria por el impago de una hipoteca con el Banco Santander y ha preguntado al alcalde si también "intervendrá en este caso".

Desde la asociación de vecinos Zazpigarren Araba, a la que pertenece la mujer afectada, Guillermo Perea, ha pedido al Gobierno Vasco que ejecute el derecho de retracto que tiene sobre el piso en cuestión porque, según ha explicado, se trata de una vivienda de protección oficial que mantiene esta calificación a pesar de haber pasado veinte años desde su construcción, porque el Ejecutivo subvencionó posteriormente el 5 % la reforma de la fachada.

La mujer cuyo desahucio se ha paralizado hoy compró el piso antes de conocer a la que ahora es su expareja y tenía una hipoteca en otra entidad con una deuda de 68.000 euros. Después refundió en un sólo crédito su hipoteca y el préstamo para el negocio que fracasó. Su deuda actual supera los 200.000 euros con intereses.