La izquierda ‘abertzale’ atrae a todos los partidos al debate sobre los presos

La izquierda abertzale ha conseguido, en vísperas de la manifestación de este sábado en Bilbao a favor de los presos de ETA, Que todos los partidos hayan tenido que retratarse sobre la política penitenciaria y la situación que viven los reclusos de la banda tras el final de la violencia terrorista. Es un asunto que está en el centro de la disputa política por el empeño de la exBatasuna en involucrar al resto de formaciones, a los que ha exigido un posicionamiento claro de apoyo o rechazo a la marcha convocada por Herrira.

De nuevo, la falta de sintonía sobre este tema entre la izquierda abertzale y las principales fuerzas políticas ha avivado una polémica con el PNV como mayor oponente. Pernando Barrena dijo ayer en respuesta a unas declaraciones del lehendakari, Iñigo Urkullu, que es “mentira que el PNV esté trabajando discretamente por los presos”, porque la “absoluta inacción” de este partido, aseguró el portavoz soberanista, “deja al PP las manos libres para que siga con su política criminal y su boicot permanente al proceso”.

La respuesta llegó de inmediato a través del dirigente del PNV Koldo Mediavilla, quien escribió en su blog que su partido está “harto” de las “manipulaciones” que realiza la izquierda abertzale para responsabilizar al PNV de la situación de los presos de ETA. Mediavilla salió en defensa de Urkullu y de los pasos que su formación están dando en esta materia: “La izquierda abertzale sabe de primera mano las gestiones llevadas a cabo por el PNV en este problema, alguna de ellas por su propia petición” con los Gobiernos del PSOE y del PP, le replicó Mediavilla a Barrena.

El choque de opiniones arrancó cuando Urkullu anunció que su partido no iba a participar en la manifestación de Herrira porque, a su juicio, “es más productivo el trabajo discreto y silencioso” que las protestas. Barrena negó rotundamente que el PNV haya hecho algo sobre los presos terroristas. Muy al contrario, achacó a la “falta de voluntad” de los peneuvistas para “defender los derechos de los presos, de movilizarse junto a la ciudadanía y de dar pasos para avanzar en el proceso de resolución”. Mediavilla quiso aclararle después que el PNV “ayer y hoy trabaja por modificar la política penitenciaria y por intentar encontrar una salida adecuada al problema de la dispersión y resocialización de los presos de ETA”.

Basagoiti recuerda que "el Gobierno no va a ceder" en el tema de los presos de ETA

Las críticas de Barrena se extendieron al PP, al que acusó de practicar “una auténtica política criminal” con el colectivo de reclusos, y a los socialistas, porque “ampara e impulsa por activa y pasiva” la política penitenciaria. Para la izquierda abertzale, la situación de los presos es “un tema de primer orden en la agenda política de este país”, según Barrena, que exige soluciones como el fin de la dispersión, la excarcelación de los reclusos enfermos graves y la anulación de la doctrina Parot.

El PP ya ha dejado claro que no está en esa clave, porque, como afirmó ayer el presidente del partido en Euskadi, Antonio Basagoiti, “al Gobierno de España no lo han movido con asesinatos, y tampoco lo moverán con manifestaciones”. En una entrevista en TVE, recordó que “el PP no va a ceder y el Gobierno de España no va a cambiar su política penitenciaria”, que calificó de “legal, coherente, razonable e igualitaria para todos los encarcelados, sean de ETA, violadores o de la mafia”.

Sobre la política penitenciaria también opinó el secretario de Política de los socialistas vascos, Rodolfo Ares, para quien “el avance en la política de reinserción está en las manos de los propios reclusos”. Tras asegurar en Radio Euskadi que el PSE-EE no estará “como organización” en la manifestación de Herrira, animó a los partidos que forman Bildu a “no jugar al victimismo” y optar por “una política razonable” porque “no va a haber amnistías ni soluciones colectivas”.