Trasladan el sarcófago del general Prim para restaurarlo

El sarcófago del general Prim fue trasladado este viernes del cementerio de Reus (Baix Camp) hasta el Centro de Restauración de Bienes Muebles de la Generalitat, donde los especialistas mejorarán su debilitado estado de conservación. Estos trabajos se programaron dentro de los preparativos del Bicentenario del nacimiento del militar reusense, que se celebrará en 2014. El mausoleo del militar, muerto en Madrid en 1870 tras sufrir un atentado, es una obra de estilo neoclásico del artista vasco Plácido Zuloaga. También se compone de una escultura de bronce bañada en plata, realizada por Êmile Hébert. La restauradora Maria Àngels Jorba prevé finalizar la conservación antes del verano, en una operación presupuestada en 50.000 euros financiada por la Diputación de Tarragona. Según explicó Jorba, la parte interna del sarcófago se encuentra en buen estado, pero no así el exterior donde el hierro “estaba sufriendo un proceso de degradación”. El mausoleo y los restos del general fueron trasladados desde Madrid hasta su ciudad natal en 1971. Entonces, los vecinos salieron a la calle para recibir a la comitiva fúnebre. Sin embargo, con el paso de los años Prim fue olvidado en el cementerio de la localidad. El cuerpo del general están siendo analizados para determinar la causa exacta de su muerte, y el Ayuntamiento de Reus asegura que aún no hay resultados definitivos.

Por lo pronto, el 27 de diciembre, coincidiendo con la fecha de su muerte, diversos actos rendirán tributo en Madrid al general. El presidente del Congreso, Jesús Posada, participará en la cámara en la presentación de un libro, en el que se recopilan los discursos de Prim. Después, la comitiva se dirigirá a la calle del Turco, hoy Marqués de Cubas, donde el general sufrió una emboscada. Allí, al lado del edifico del Banco de España el alcalde de Reus, Carles Pellicer, y la alcaldesa de Madrid, Ana Botella, descubrirán una placa conmemorativa. Además, habrá un desfile militar a cargo del batallón de Voluntarios Catalanes. Doce soldados desfilarán por las calles de Madrid con la vestimenta de la época: barretina catalana, espardenyes y carabinas.