El PNV acusa a un cargo vitoriano de realizar una operación “especulativa”
Alfredo Piris compró en 2005 junto a cuatro inmobiliarias suelo rústico por 7,4 millones
El PNV de Vitoria ha denunciado ante los medios de comunicación una operación “encubierta” realizada en 2005 por Alfredo Piris, gerente de Ensanche 21, la sociedad urbanística del Ayuntamiento de la capital alavesa para la expansión de la ciudad, con el fin de “especular” con suelo rústico de los alrededores de Vitoria.
Gorka Urtaran, portavoz municipal peneuvista, explicó ayer que Piris impulsó, junto con cuatro inmobiliarias vitorianas, la compra de un lote de 500.000 metros cuadrados de suelo rústico (no urbanizable) en el Alto de las Neveras, al sudeste de la ciudad, por 7,4 millones de euros. En la operación, Vitoria asumió un tercio de la participación, detalle, junto al de las promotoras, que el Consejo de Administración de Ensanche 21 no conocía cuando la autorizó por unanimidad, según el PNV.
La compra se hizo a 51 euros el metro cuadrado, cuando el valor del mercado era de 1,5 euros, criticaron los peneuvistas. La operación se hizo a través de una sociedad cuyo nombre el consistorio mantiene en secreto y que está participada al 100% por Ensanche 21. El Ayuntamiento justificó ayer esta fórmula con el argumento de que, de conocerse que el consistorio es el comprador real, los precios de venta se disparan.
Siete años después, el terreno se ha convertido en un vertedero ilegal y sigue siendo rústico, sin opciones de ser recalificado, ya que se encuentra fuera del plan general y “fuera del ámbito de actuación de Ensanche 21”, recalcó Urtaran.
Portavoces del Ayuntamiento aportaron después la versión de Piris, poniendo en valor que trató de controlar un área que “siempre ha sido estratégica” para el Ayuntamiento y en la que la Vital estaba comprando terrenos a un valor “muy superior”. Y es que la zona es parte de un hipotético futuro corredor verde.
Sin planes de construcción, ello no desanimó a las promotoras a sumarse en la compra. Esos portavoces reconocieron que no hay planes para la zona ni a corto ni a medio plazo y desconocen si los habrá a largo.
Enésima polémica
En 2003 Alfredo Piris sacó a concurso, a través de Ensanche 21, cinco parcelas que rodean al Buesa Arena por 16 millones de euros. El concurso quedó desierto. Luego se repitió con un precio por debajo del tasado inicialmente, resultando comprador el dueño del Baskonia, Josean Querejeta, por 8,3 millones de euros. Cuatro de las cinco parcelas fueron vendidas después. La Fiscalía alavesa llevó el caso a los tribunales al ver perjuicio para las arcas públicas, pero la causa se archivó.
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