Lo que el ‘arte tribal’ y actual le debe a Man Ray
Soler y Llach subasta 144 fotografías del autor, la mayor venta en los últimos 17 años
Pasa por ser una de las colecciones privadas de fotografías de Man Ray más completas que existen. Durante 30 años, el florentino Camillo d’Afflitto adquirió, una tras otra, las imágenes que dan a conocer los múltiples intereses de este artista dadaísta y surrealista convertido en uno de los mejores fotógrafos del siglo XX: retratos, objetos, fetiches, aficiones, arquitectura y naturalezas muertas. Algunas, auténticos iconos como Negro y Blanco, de 1926, que fue portada de revistas de moda, pero también hay imágenes de objetos de arte no occidental, todas realizadas entre 1920 y 1970. La sala Soler y Llach organiza para el día 30 de octubre la subasta Man Ray. Colección Camillo d’Afflitto. Nueva York, en la que vende 144 de las fotografías, todas vintageo tiradas de época, en la que está considerada la mayor venta que se produce de este fotógrafo desde 1995.
Man Ray trabajaba sus contactos con sumo cuidado. Las imágenes reunidas por Afflitto proceden de estos primeros contactos, por lo que muestran a un Ray más puro. Así lo ve la crítica de arte y comisaria Pilar Parcerisas, que durante años ha sido la conservadora de esta colección y la encargada de divulgarla y pasearla por varios países europeos. Para Parcerisas, la colección es fundamental por abarcar todos los temas de la obra fotográfica de Ray: los retratos de surrealistas como Erik Satie, Tristan Tzara, Paul y Nusch Éluard o Juan Gris; los objetos manipulados que él llamó Objects of my affection; la belleza mestiza de su amante Ady Fidelin, las naturalezas muertas, los interiores misteriosos o el ajedrez. Pero, sobre todo, la colección destaca, según la experta, por el conjunto de imágenes que realizó de obras de arte no occidentales, sobre todo africanas, que ayudaron a que el arte tribal dejara de ser considerado un arte menor y pasara a ser considerado arte moderno. Un papel que se ha reivindicado recientemente en varias exposiciones americanas. Negro y blanco, de 1926, en la que enfrentó un rostro blanco con una máscara africana baule, no es una excepción. Fotografió objetos de colecciones como la Kjersmeier y las de obras del Museo del Hombre de París de los años treinta.
Juan Naranjo, director del departamento de fotografía de Soler y Llach, destaca la importancia de la subasta “por el número de imágenes y la amplia visión de la obra de este artista, que le hace tener al conjunto un carácter pedagógico por mostrar facetas menos conocidas como las imágenes de arte tribal”. En cuanto a los precios, a partir de 2.000 euros, Naranjo asegura que son muy razonables. La más cara es Negra y blanca, que parte de 150.000 euros, “ha salido a la venta muy pocas veces, y eso hace que se mantenga su cotización”. Durante años fue la imagen más cara, tras comprarla Elton John por unos 400.000 dólares. Según Naranjo, el valor de toda la colección supera el millón de euros.
A pesar de la crisis, y tras presentarlas en Madrid la semana pasada y hoy lunes y mañana en París, esperan vender las fotografías sin problemas. Según explica Naranjo, “los jóvenes sienten atracción por la obra de Man Ray porque sirve para entender la producción contemporánea”. Por eso, los clientes suelen ser “público internacional de entre 30 y 50 años”. Para Naranjo, la crisis hace que sea un buen momento para comprar fotografías: “Hay muchas piezas interesantes a muy buen precio, y aunque en España sea difícil conseguir clientes por la mala situación económica que atravesamos, si haces una buena labor, el mercado del arte internacional funciona”, mantiene Naranjo. Una de las últimas voluntades del coleccionista Afflitto fue que su colección tuviese salida desde España. Con la venta del día 30 se verá cumplida.
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