Catorce Ayuntamientos han solicitado ya auxilio financiero a las Diputaciones

La crisis está haciendo daño a los Ayuntamientos vascos. Catorce de ellos, 12 guipuzcoanos y dos alaveses, han solicitado ya ayuda a sus respectivas Diputaciones para oxigenar su delicada situación financiera. En Bizkaia las aguas bajan, en apariencia, más tranquilas. Las Juntas Generales de este territorio aprobaron una norma que permite a los consistorios elevar el límite de su deuda mediante créditos especiales para poder pagar a los proveedores las facturas pendientes. Fuentes forales aseguraron ayer a EL PAÍS que ningún municipio ha reclamado, por ahora, acogerse a esta opción.

Los Ayuntamientos vascos adeudan en conjunto a las tres Diputaciones 128 millones de euros por la diferencia entre lo que recibieron en 2011 de los fondos forales de financiación —1.382 millones— y la liquidación real, es decir, lo que les correspondía en función de la recaudación tributaria de las tres Haciendas —1.253 millones—. A ello hay que añadir las obligaciones de pago a los proveedores y las malas previsiones fiscales para este año, que podrían hacer más grande todavía el agujero.

Bizkaia adelantó la pasada semana que entre enero y julio sus ingresos cayeron un 2,5%. Si se tiene en cuenta el ajuste del IVA con el Estado, el descenso subiría hasta un 4,95%. Con este último dato ya incluido, Gipuzkoa recaudó entre enero y mayo un 5,8% menos y Álava, un 9,3% menos.

Los consistorios deben en conjunto 128 millones a las Haciendas forales

Ante este panorama, Eudel, la asociación que reúne a los 251 Ayuntamientos vascos, ha solicitado “prudencia” en el gasto y “medidas de contención y ajuste”. “Con los datos de que disponemos, prevemos que los consistorios puedan verse obligados a devolver nuevamente parte de lo que van a recibir a cuenta en 2012”, trasladó a los alcaldes ya a finales de junio. “Recomendamos que se utilicen en la gestión económico-presupuestaria las cifras resultantes de la liquidación de 2011”, advertía.

Doce Corporaciones guipuzcoanas (Altzaga, Aretxabaleta, Ataun, Azkoitia, Elgeta, Gaintza, Hernani, Pasaia, Urretxu, Villabona, Zaldibia y Zumaia) han solicitado créditos a la Caja Rural en condiciones favorables para poder hacer frente al pago íntegro de la deuda pendiente. La Diputación actúa como mediadora en las negociaciones. Los Ayuntamientos han tenido que presentar un plan económico-financiero viable que ha sido supervisado por el Ejecutivo foral.

El diputado alavés de Administración local, Javier Ruiz de Arbulo, desveló a finales de junio que diez Ayuntamientos estaban en quiebra —Kripán, Navaridas, Oyón, Ribera Alta, Ribera Baja, Salvatierra, Urkabustaiz, Valdegovía, Valle de Arana y Laguardia— y otros ocho en situación “crítica”. La Diputación se ofreció a “flexibilizar” su deuda a cambio de que se sometieran a un plan de viabilidad. Fuentes forales aseguraron ayer que, por el momento, solo dos de los municipios han reclamado el rescate: Salvatierra y Valle de Arana.

Bizkaia ha aprobado una norma que permite a sus Ayuntamientos elevar su deuda con créditos especiales para pagar a proveedores. La Diputación fija el tipo de interés, previo acuerdo con las entidades financieras, y el plazo máximo de amortización. La previsión foral era que en torno a 30 consistorios se iban a acoger a la medida y que el montante total de la operación ascendería a unos 30 millones de euros. Ningún alcalde ha reclamado la ayuda hasta el momento.