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ECONOMÍA VASCA

El Gobierno vasco cree que España pierde soberanía con el rescate

El ‘lehendakari’ pide transparencia para que no lo paguen los trabajadores

Pedro Gorospe
Patxi López, segundo por la derecha, ayer en la Unidad de Neurocirugía de Cruces.
Patxi López, segundo por la derecha, ayer en la Unidad de Neurocirugía de Cruces.miguel toña (EFE)

Salvo el PP, la mayoría de los agentes políticos y económicos vascos coincide en que el rescate de la UE al sistema financiero español es una mala noticia. Para el Gobierno vasco es además un signo de tutela a la economía española que va a suponerle una pérdida de soberanía, en la medida en la que los prestamistas van a exigir unas duras contrapartidas financieras al prestatario y le van a controlar más allá del destino de los fondos.

El lehendakari, Patxi López, mostró ayer la disposición de su Gobierno a colaborar ante esta situación difícil que atraviesa el Estado a cambio de que la gestión de las ayudas sea absolutamente transparente y de que la recapitalización de los bancos y cajas más afectados sirva para devolver el crédito a las empresas y las familias.

Aguirre: “Ya veremos la magnitud de la pérdida de soberanía”

López dijo en Barakaldo, donde visitó el bloque quirúrgico de Neurocirugía y Raquis Medular del Hospital Universitario de Cruces, que, “por mucho que se quiera contar de otra manera”, no estamos ante una buena noticia, primero por lo que significa en sí misma, es decir, que España tiene que pedir ayuda para resolver los problemas de algunas de sus entidades financieras, y después porque todavía se desconocen las contrapartidas del crédito.

López explicó que con el rescate a los bancos “se pierde margen de maniobra y vamos a estar más limitados, condicionados y más tutelados por quienes nos prestan el dinero, que van a imponer condiciones para ello”.

“Los ciudadanos pueden estar más tranquilos”, asegura Basagoiti
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El consejero de Economía y Hacienda, Carlos Aguirre, definió esa situación de manera clara: “El rescate supone una pérdida de soberanía para España. Ya veremos la magnitud de la pérdida”, dejó caer ayer en el Parlamento vasco antes de entrar a responder a las preguntas de los partidos de la oposición en la comisión de Economía.

El lehendakari cree, además, que el préstamo va a aumentar de forma considerable la deuda pública y por lo tanto “repercutirá en las condiciones que tenemos que cumplir para asegurar el cumplimiento del control del déficit”, indicó. “Hay que salvar y sanear nuestro sistema financiero, saneando los bancos que estén en dificultades, pero este no debe de ser un objetivo aislado, sino que debe de servir para ayudar a la economía en su conjunto”, subrayó.

“Un banco de pruebas” para Urkullu

España está siendo “tomada como un banco de pruebas” en materia financiera. El presidente del EBB del PNV, Íñigo Urkullu, dijo ayer que no le gusta la fórmula que se ha utilizado para el rescate de la banca española y se mostró “molesto” con la actitud del Gobierno central por su falta de transparencia.

En una entrevista a ETB aseguró que las elecciones este fin de semana en Grecia generaban más dudas e incógnitas y, por lo tanto, había que proceder previamente al rescate de la banca española. La decisión de ayudar a los bancos “es una pieza dentro de lo que es la situación que vive la eurozona y EE UU”.

El dirigente nacionalista cree que las reformas vienen casi impuestas por parte de las instancias europeas y los mercados, y aseguró que “por mucho que intenten hacer ver” que es un proceso de saneamiento del sistema financiero, habrá que ver cuáles son las condiciones crediticias que se van a establecer.

Urkullu criticó al PP y al Gobierno liderado por Mariano Rajoy por no ser claros ni transparentes. “No puede ser que durante diez días estemos oyendo que España no va a ir al rescate, que España es solvente, que no va a necesitar de ayuda externa y, luego, un día, suceder lo que sucede y al día siguiente salir el presidente del Gobierno diciendo que gracias a él, a que ha pedido que se intervenga y a que se han adoptado medidas anteriormente, el Estado español no está intervenido”, criticó. Para el presidente del PNV la situación está clara. “Si el Estado español no está intervenido de facto, como se dice coloquialmente, que venga Dios y lo vea”.

Y una manera de ayudar a la economía es, según dijo, que el proceso se haga con transparencia. Una transparencia que vaya acompañada por el esclarecimiento de todas las responsabilidades en las que hayan podido incurrir los responsables de llevar a las entidades con más problemas hasta el punto de comprometer la economía de todo un país. “Hay que sanear la banca española” pero hay que hacerlo de esa manera para que esta crisis bancaria no sea pagada, una vez más, por los trabajadores o las clases medias, “que son los principales perjudicados”.

López volvió a referirse a Kutxabank como una caja de referencia del sistema financiero. “Es una caja solvente que ha sido bien gestionada”, recordó.

El PP, sin embargo, no se salió del guión oficial. El presidente de los populares vascos, Antonio Basagoiti, dijo que “hoy estamos mejor que ayer, que hace una semana y que hace un año” para empezar a afrontar la salida de la crisis pese a reconocer que todavía quedan ajustes por hacer, porque va a aumentar el déficit país. En una entrevista a La Sexta, recogida por Europa Press, manifestó que España había tocado “fondo”, pero ahora ya los españoles “pueden estar más tranquilos”.

Basagoiti precisó que los ajustes pendientes van a ser mucho menos dolorosos para los ciudadanos que en caso de haber optado a las “alternativas A o B”.

“La A era la quiebra de España, la B la intervención del país, la C, el rescate de los bancos malos, ésta nos va a hacer mucho menos daño, algo influirá porque aumentará el déficit del país sin ninguna duda y tendremos que hacer más ajustes, pero no tiene nada que ver con lo que supondría en el caso de que España hubiera sido intervenida como Portugal o Grecia o en el caso de que no se hubiese hecho nada como pasaba en el pasado”, agregó.

El parlamentario y coordinador general de Ezker Anitza-IU, Mikel Arana, criticó que el Gobierno español toma a los ciudadanos “por idiotas” por no ser claro. Para Amaiur la banca no necesita ser rescatada “sino investigada, procesada y juzgada”.

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Sobre la firma

Pedro Gorospe
Corresponsal en el País Vasco cubre la actualidad política, social y económica. Licenciado en Ciencias de la Información por la UPV-EHU, perteneció a las redacciones de la nueva Gaceta del Norte, Deia, Gaur Express y como productor la televisión pública vasca EITB antes de llegar a EL PAÍS. Es autor del libro El inconformismo de Koldo Saratxaga.

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