El Gobierno vasco dice que Gisasola iba a mostrar su público arrepentimiento

El Gobierno vasco cree que con el veto del Ministerio de Interior a la asistencia de la exetarra Carmen Gisasola, presa en la cárcel de Zaballa, al congreso por la paz que se celebrará en dos semanas en Bilbao se perderá “una importante oportunidad” para que la sociedad vea el resultado de las políticas de reinserción en los terroristas que se han apartado de ETA.

Gisasola iba a realizar en público en el congreso una “revisión crítica de su pasado” y a manifestar, de modo igualmente público “su arrepentimiento”, dijeron fuentes del Ejecutivo socialista, que ve la posición del PP tan cerrada que no intentará siquiera que cambie de opinión. Decepciona así, por su otro flanco, las expectativas del PNV, cuyo portavoz en la materia, Iñigo Iturrate, pidió ayer al Ejecutivo en los pasillos del Parlamento vasco que se mantenga firme y “no ceda” ante el veto y “las presiones” del PP.

El Gobierno vasco sabe que es perfectamente estéril empeñarse en algo que está en manos del central, competente en materia penitenciaria. Incluso si, como vino a sugerir Iturrate, Gisasola hubiera tenido pedido o concedido un permiso que le posibilitara estar fuera de prisión durante el congreso —del 14 a 20 de este mes— Instituciones Penitenciarias podría dejarlo sin efecto.

El Gobierno autónomo asume así que Gisasola no estará en Bilbao aunque, según Europa Press, piensa que el congreso “no desmerecerá” por ello. Sí lamenta que se desperdicie la ocasión de “ejemplarizar”, también en dirección a los demás presos de ETA, que tienen dos vías: la seguida por Guisasola, que le está permitiendo pagar su condena en mejores condiciones, o la de cumplirlas íntegras en las que tienen actualmente. Iturrate dijo que no tiene sentido animarles a tomar la primera senda y luego excluir a quienes lo hacen “de la construcción del futuro”. El parlamentario peneuvista apuntó que la exetarra cumple todos los requisitos que se piden, “incluido el PP”, a un miembro de la banda para reinsertarse.

La hija de una víctima de Gisasola se puso en contacto con la presidenta de la Asociación de Víctimas del Terrorismo (AVT), Ángeles Pedraza, para tratar de evitar la participación de la exetarra en el congreso, según explicó ayer la propia Pedraza. La víctima es una de las hijas de Juan Rodríguez Rosales, asesinado por ETA en 1984, crimen por el que Gisasola fue condenada en 2002 a 29 años de prisión. Pedraza trasladó ese malestar al presidente del PP vasco, Antonio Basagoiti, quien le garantizó que la exetarra no participará en el cónclave.