La juez interroga a Fernando Blanco por un premio de lotería que no declaró

El exconselleiro de Industria, Fernando Blanco, aprovechó su segunda comparecencia ante la juez que lleva la Operación Campeón, Estela San José Asensio, para negarlo nuevamente todo: “Fui desmontando todas las falacias y calumnias que ha dicho Dorribo sobre mí”, anunció el también exdiputado nacionalista a la salida de la sala de Instrucción 3.

Era la segunda vez que se sometía al interrogatorio de la instructora, tras la del 29 de noviembre, cuando ya negó haber participado en ningún negocio de Jorge Dorribo, el principal imputado, y haber favorecido su entramado empresarial cuando era conselleiro. Pero la juez, en esta ocasión, incidió, sobre todo, en episodios tan concretos como el del premio de la Lotería de Navidad que ganó Blanco, un ingreso que se refleja en una transferencia bancaria, pero que no fue declarado a Hacienda. Estela San José le adelantó que la cantidad ganada, 78.800 euros, “coincide con las anotaciones de la contabilidad B de Nupel que no fueron manipuladas”. A esto Blanco negó que ese dinero fuese un pago de Dorribo.

Más adelante, después de diversas cuestiones, San José volvió sobre el tema. Le preguntó si seguía sosteniendo que la cantidad ingresada se debiese a la suerte y que cómo explica que “no haya en Hacienda rastro de eso”. Y el nacionalista respondió que le dijeron que eso no había que declararlo. Cuando concluyeron las preguntas de todas las partes, al final del interrogatorio y antes de recibir la declaración para leerla y firmar, el imputado pidio que constante que “no sabía que tenía que declarar lo de la lotería”.

El exdiputado reconoció que pidió al dueño de Nupel trabajo para Bazarra

Por lo demás, Fernando Blanco reconoció sus diversas comidas con el dueño de Nupel (una de ellas en el club gastronómico-financiero Acción & Klasse), sus dos visitas a la planta de O Ceao y su viaje a Camerún, después de dejar la consellería, no como socio, sino para asesorar por su conocimiento del sector eólico. También admitió que, al dejar la Xunta, le preguntó a Jorge Dorribo por un trabajo para su asesor en la consellería, Xoán Manuel Bazarra, que luego fue nombrado gerente de los negocios de Andorra. Pero negó su participación en cualquier negocio del principal imputado de la trama Campeón, que tuviese un hombre de paja para hacerlo, que entregase o recibiese dinero negro, o un diamante o un coche. También que favoreciese a Dorribo con ayudas públicas a través Salustiano Mato, el entonces responsable de I+D+i. También que enviase ex profeso un inspector desde Santiago, obviando al personal de la Xunta en Lugo, para comprobar si Nupel cumplía los requisitos.

“Estuve completando la información que dí en mi primera declaración y, por lo tanto, salgo absolutamente satisfecho y tranquilo”, dijo el imputado a la prensa tras el interrogatorio. “Creo que quedaron perfectamente acreditadas [las mentiras]“, añadió el exparlamentario del BNG, cargo al que renunció tras las denuncias que había lanzado el empresario farmaceútico.

Los abogados solicitarán el sobreseimiento de la causa en abril

Blanco llegó sobre las diez de la mañana a los juzgados de la plaza de Avilés y entró con una procuradora y uno de sus abogados, Xoán Antón Pérez-Lema. El otro, Evaristo Nogueira, le aguardaba en los pasillos del tercer piso, donde se emplaza el despacho de San José Asensio. Sobre las doce y media, el político que convocó una rueda de prensa para explicarse pocos días después de levantarse el secreto del sumario, se enfrentó a las cuestiones de los periodistas tras prestar declaración durante “cincuenta minutos”.

El exconselleiro señalado por Dorribo dijo que “no existe ninguna prueba de cargo” en la causa salvo la declaración, un auténtico “sainete”, del principal imputado. “Yo no aparezco en ninguna conversación, no aparezco en vídeos, no aparezco en fotos, no tengo ninguna conversación con ninguno de los imputados en la operación Campeón y esto es lo que hay”. Pérez Lema anunció que los abogados pedirán el sobreseimiento de la causa sobre su cliente “inmediatamente después de Semana Santa”.