La segunda muerte del alcalde

Los hechos siguen demostrando que muchas víctimas de la represión franquista mueren dos veces: la primera ante el pelotón, y la segunda a mano de la censura que impide su recuerdo.

Aquilino Barrachina Ortiz nació en Anna, pero el delito por el que le fusilaron en Alicante hace 71 años fue haber sido primer edil de Pego en la II República. Alcalde y socialista, frente a una oposición feroz que no daba tregua ni reconocía sus logros como la llegada del agua potable a las casas o la biblioteca pública municipal... Abundan testimonios sobre la víctima, que se mostraba como un socialista radical y como un hombre de paz. Después del 18 de julio, Barrachina se enfrentó a los milicianos que pretendían actuar contra las iglesias y los amigos de los rebeldes.

Sólo ahora se ha reconstruido su historia, y lo ha hecho un libro de Teresa Ballester y el responsable del Archivo Municipal de Pego, Joan Miquel Almela, en un volumen coordinado por Francisco Moreno.

A punto de acabar la guerra, Aquilino se resistía a abandonar el pueblo, creyendo que las manos limpias de sangre serían el mejor aval ante la nueva autoridad. Al final le convencieron para unirse a los miles de personas que aguardaban inútilmente una salida en el puerto de Alicante, y que también acabaron en las cuerdas de prisioneros obligados a moverse en vagones, con peor trato que el ganado, según su propio relato en cartas a la familia. En Pego se le sentenció.

Abundan testimonios sobre la víctima, que se mostraba como un socialista radical y un hombre de paz

Todo esto lo resumía Almela en un artículo para el libro de fiestas de Anna. Ni en su pueblo natal ni en Pego, hasta hace 4 días, se había vuelto a hablar del “alcalde barbeta", como se le conocía de joven, y solo este Año se le ha dedicado una calle. Con los votos en contra del PP, en la oposición. Tal vez esta circunstancia es la que podría explicar el veto en Anna, regida ahora bajo el mismo signo político. “Después enviar el artículo encargado —sólo trataba de dar a conocer un personaje de Anna desconocido por la mayoría— la responsable me comunicó no se iba a publicar, que el alcalde no quería nada que tuviera que ver con la religión ni con la política. Ella estaba avergonzada, pero desde el Ayuntamiento no se me ha ofrecido ninguna explicación oficial”, explica el archivero Almela.

"No me parece oportuno"

El alcalde Miguel Adrián tiene fama en el pueblo de obviar la memoria histórica y prohibir actuaciones de Xavi Castillo o de rock. No es eso lo que ha comentado a EL PAIS: “Creo que sí hemos de conocer la historia, y ya hemos rescatado algunos músicos, pero no me parece oportuno que esto se ponga en el libro de fiestas. Son fechas de alegría y si publicamos algo así en cuatro días tenemos ochenta escritos en sentido contrario...". Adrián añade que está orgulloso de haber tenido un alcalde de Pego, aunque desconoce todo de Barrachina. Más motivos para el rescate.