Iniciativa y ERC llaman a la insumisión fiscal hasta que el Estado pague

Los partidos de la oposición han criticado duramente el anuncio de la Generalitat sobre el retraso del pago a proveedores y del 20% de la paga de Navidad de los funcionarios. Consideran que es una medida “insólita” y piden explicaciones al Gobierno catalán sobre la gestión de tesorería realizada durante todo el año y que justifique la adopción de esta decisión a mediados de diciembre, en plena campaña navideña.

Críticas aparte, el secretario general de Iniciativa per Catalunya (ICV-EUiA), Joan Herrera, ha ofrecido a la Generalitat una alternativa: la insumisión fiscal, es decir, que retrase el pago de los impuestos del IRPF y de la Seguridad Social al Estado. Según Herrera, el Gobierno catalán dispone de “instrumentos de fuerza” para reaccionar ante la demora de los 759 millones de euros y propone esta demora en el pago de los tributos, que los ecosocialistas calculan que puede comportar una disposición de 150 millones de euros en el caso del IRPF y de unos 300 millones en el de la Seguridad Social.

En este mismo sentido se han expresado Esquerra Republicana (ERC) y Solidaritat. La portavoz republicana, Anna Simó, ha reclamado a la Generalitat que haga “pagar la fiesta” al Estado y no a los funcionarios. Simó también propone el retraso en el abono de la Seguridad Social al Gobierno español y, de hecho, la portavoz de los republicanos ha recordado que el Gobierno de la Generalitat hizo algo similar a final de la década de los noventa. La portavoz de ERC también ha censurado al Ejecutivo catalán por tomar la “decisión unilateral” de posponer el pago de la nómina de Navidad y por el hecho de que el anuncio no se haya puesto sobre la mesa en las negociaciones que mantiene con los sindicatos de la función pública. “Ahora, de repente, les comunican la inocentada del año”.

El portavoz del PP, Enric Millo, ha calificado de “insólito” el anuncio de la Generalitat y de cercana a la “suspensión de pagos” la decisión, y critica que el Gobierno genere alarma social. Asimismo ha pedido que se desvincule del problema de tesorería de lo que es un conflicto político por el impago. El portavoz popular ha recordado también a Mas que los 759 millones deben destinarse a inversiones en infraestructura, no a pagar nóminas, y ha anunciado que, si la situación no se resuelve antes de finales de año, pedirán que se depuren responsabilidades entre los responsables de tesorería de la Generalitat. “No puede ser que a finales de año se diga que existen semejantes problemas de tesorería. No es de recibo de un Gobierno responsable”, ha remachado Millo.

En un tono menos contundente se ha expresado el jefe de la oposición, Joaquim Nadal (PSC), quien ha mostrado su apoyo al Gobierno catalán y ha vuelto a solidarizarse con él en la reclamación de los 759 millones de euros que el Estado debe a Cataluña en concepto de inversiones en infraestructuras no realizadas. No obstante, en el marco de estos nuevos recortes en los salarios públicos, Nadal ha reclamado a Artur Mas más transparencia. Concretamente, el líder socialista pide al Ejecutivo catalán que explique la política de tesorería llevada a cabo el último año y que asegure que antes de decidirse a tocar los capítulos referentes a personal se han congelado los gastos en inversiones.