El universo de las fragancias recurre a la nostalgia para reencontrarse con su vertiente más mística; busca una dimensión holística, explorando las facetas espiritual y ‘talismánica’ de los aromas. Mientras, las innovaciones expanden la paleta de los perfumistas.
La realidad virtual agrega nuevas dimensiones a la escena ‘wellness’ y nos permite darnos un paseo por otro mundo –incluida la luna– sin escafandra ni ‘jet-lag’ espacial.
La agresividad de los productos limpiadores y las aguas de dudosa calidad pueden desestructurar y deshidratar nuestra piel. Buscamos soluciones para evitarlo.
El resurgir de la aromaterapia y los aceites esenciales ha logrado que las velas sean la opción de compra perfecta tanto para disfrute personal como para agasajar a terceros.
Efecto jade, turquesa, cuarzo rosa o incluso ejemplares más rebuscados, como la labradorita y su tornasolado destello hipnotizante. No hay límites a la hora de estampar sobre este lienzo de moda –la uña– cualquier motivo por complejo que parezca.
100% vegetal, cruelty free y toda la cofradía de los “sin”. La apreciación del consumidor está cambiando y se refleja en la oferta y la demanda, también de maquillaje. Pero ¿sabemos identificarlos y son tan eficaces como los tradicionales?
Es una de las preguntas más repetidas por las futuras mamás y una de las más habituales en consultas médicas y centros de belleza… esto es lo que requiere el abordaje estético de esta delicada zona, según los expertos.
Salió del anonimato como alivio anti jet-lag y ha terminado popularizándose como remedio contra la falta de sueño y el envejecimiento pero, ¿es realmente efectiva?
“Body is the new face”. Con este eslogan lo advierten los cazatendencias: la positividad corporal, el bienestar y la sensualidad darán impulso a categorías de belleza olvidadas e incluso no exploradas.
Hay productos de belleza más costosos que la letra de la hipoteca, pero… ¿qué es lo que realmente justifica su alto precio? ¿El estado de la piel mejora exponencialmente tras su uso? Aviso: el caché de la marca o los costes de publicidad, no cuentan.
El perfume, además de embriagar, quiere ser útil: eliminar el estrés, despertar la conciencia o servir de evasión son algunas de sus nuevas ambiciones.