$Libra: reconstrucción de una estafa

Javier Milei enfrenta su momento más crítico desde que asumió como presidente de Argentina. Su apoyo y difusión de un token llamado $Libra, que respaldó con la publicación de un posteo en X, provocó que una gran cantidad de inversores invirtieran en la moneda, que terminó desplomándose y perdiendo todo su valor después de que los desarrolladores retiraran entre 80 millones de dólares y 100 millones de dólares a menos de una hora de haberla creado.

En este artículo, encontrarán un detalle de la cronología de los hechos y algunas explicaciones sobre cómo funciona el ecosistema cripto para entender por qué se habla de una mega estafa.

El armado: una web, $Libra y fondeo

Lo primero que crearon fue la página web Viva la libertad project, a través de la cual brindaron información muy básica sobre cuáles eran los objetivos del proyecto. Según dicen los desarrolladores, con la emisión de $Libra buscaban recaudar fondos que sirvan para financiar a emprendedores argentinos.

Media hora antes del posteo de Milei en redes sociales, alrededor de las 18.30, crearon el token $Libra. Para hacerlo, usaron una plataforma llamada Fixed Float, que no pide ninguna identificación personal y permite usuarios anónimos. Por lo general, esta es la plataforma más usada por estafadores.

Transfirieron a 12 billeteras diferentes el total de las monedas creadas. Esto se hace para dividir el total en diferentes partes y que el proyecto no sea considerado rápidamente como una estafa.

Cinco minutos antes de que Milei postee, diferentes usuarios del equipo que desarrolló $Libra transfirió fondos, lo que técnicamente se llama pool de liquidez, para que los inversores puedan comprar y vender $Libra.

El apoyo de Milei: la explosión del valor

A las siete de la tarde de Argentina, Javier Milei difundió el lanzamiento de $Libra a través de la red social X. Al hacerlo, copió el número de identificación de la criptomoneda (el “contrato”), para que los inversores pudieran llegar rápido a ella. A partir de esa publicación, $Libra comenzó a comprarse y venderse.

Sin ese número, nadie habría podido “encontrar” la moneda para comprarla, porque era un proyecto recién creado y las plataformas más grandes a través de las cuales se compran criptomonedas no la tenían “incluida” entre las opciones de inversión.

En 45 minutos, el precio de los tokens escaló meteóricamente hasta tocar un valor máximo de 5,54 dólares por unidad. Un ejemplo: el primer comprador de $Libra pagó 0,216 por cada token y compró en el mismo momento en el que Milei publicó el posteo en X. Alrededor de 37 minutos después, ese usuario vendió la mayor parte de lo que tenía y tuvo una ganancia neta de 6,5 millones de dólares.

El impacto de la publicación del posteo de Milei fue masivo: entre compradores y vendedores de la criptomoneda movieron un volumen de 1.500 millones de dólares. Y llegó a tener una capitalización de mercado, o sea tener un valor total, de 4.500 millones de dólares, comparable al de un banco privado argentino.

Alrededor del 84% de las monedas estaban en poder de tres usuarios, que forman parte del equipo de desarrollo. Habitualmente, en este tipo de proyectos, los desarrolladores tienen 15% a 20%.

La gran estafa: información privilegiada y ganancias extraordinarias

Alrededor de 40 minutos después de su lanzamiento, los primeros usuarios que habían comprado $Libra empezaron a vender. Esto provocó una caída del 70% en su cotización en la siguiente hora: pasó de 4,74 dólares a 1,44 dólares.

De acuerdo al análisis de expertos en el mundo cripto, la mayor parte de esas ventas las hicieron usuarios que formaban parte del desarrollo del proyecto. Esto fue confirmado por Hayden Davis, autoproclamado asesor de Milei y CEO de la empresa que creó $Libra.

En una entrevista con Stephen Findeisen, un youtuber conocido como Coffeezilla, Davis admitió que ganó alrededor de 100 millones de dólares, que todavía conserva alrededor de 11 millones en criptomonedas y que cobró 13 millones de comisiones por las ventas de las criptomonedas. En total, Davis asume que obtuvo una ganancia de 113 millones de dólares de forma directa.

Pero la ganancia extraordinaria de los creadores del proyecto contrastan con la pérdida de más del 75% de los inversores que compraron $Libra de buena fe.

Según el experto argentino Fernando Molina, el 62.8% de las wallets perdieron hasta 1.000 dólares; un 8.7% perdió entre 1.000 y 10.000 dólares y un 2.94% perdió entre 10.000 y 100.000 dólares. Entre los que ganaron, un 22,3% ganó entre hasta 1.000 dólares, un 2,62% ganó entre 1.000 y 10.000 dólares; los que ganaron más de 100.000 son solo el 0,18%. Es decir, tres de cada cuatro inversores perdieron dinero, mientras que solo uno de cada cuatro obtuvo alguna ganancia.

La billetera que más ganó hizo cuatro compras de 250.000 dólares en el mismo momento en que Milei publicaba su posteo en X y empezó a vender 45 minutos después. Su ganancia neta fue de 8,5 millones de dólares.

El mayor perdedor hizo su primera compra 10 minutos después del posteo de Milei y siguió comprando durante los siguientes 13 minutos, para comenzar a vender luego de que Milei publicase el retiro del apoyo al proyecto. En total, perdió 5,25 millones de dólares.

Las sospechas de analistas del mundo cripto es que quienes lograron quedarse con el dinero no solo son quienes crearon el proyecto, como Davis mismo admitió en una entrevista, sino algunos inversores que accedieron a información privilegiada.

Memecoin

Otro punto importante es si $Libra es o no es una memecoin, aspecto central para determinar el grado de responsabilidad de Milei. Una memecoin es una criptomeda basada en chistes populares de Internet. Si hubiera que hacer una comparación con el mundo analógico, se podría decir que son “figuritas” coleccionables. En el caso de las memecoins, suelen ser proyectos sin una utilidad específica y que los inversores tienen o compran por diversión.

Todo el desarrollo de $Libra utilizó las herramientas que se usan normalmente para las memecoins. Así que, técnicamente, $Libra sí es una memecoin y eso se termina de comprobar con las maniobras que hicieron sus desarrolladores, que se quedaron con las ganancias extraordinarias gracias al apoyo de Milei. Así suele pasar con cualquier emisión de este tipo de criptomonedas.

El problema es que el presidente argentino publicitó este proyecto como algo serio, no como una memecoin, con lo cual existen dos interpretaciones posibles: no sabía lo que estaba promocionando y, por lo tanto, fue engañado (habría que determinar quiénes y su grado de responsabilidad); o el presidente no podía no saber y es penalmente responsable por los delitos cometidos con este lanzamiento.

“No estaba interiorizado en el proyecto”

Apenas pasada la medianoche del viernes, más de cinco horas después de haber publicitado la criptomoneda en X, el presidente borró el posteo y con el argumento de que “no estaba interiorizado de los pormenores del proyecto”. “Luego de haberme interiorizado decidí no seguir dándole difusión (por eso he borrado el tweet)”, escribió. La publicación terminó de destruir la cotización de $Libra y consolidó las pérdidas para la mayor parte de los usuarios que habían adquirido el activo.

Al contramano de su hiperactividad en redes sociales, Milei pasó el fin de semana sin hacer declaraciones ni compartir contenido. Estuvo encerrado en la Quinta de Olivos, la residencia presidencial de Argentina, y solo fue visitado por su círculo íntimo: su hermana, Karina Milei, el asesor Santiago Caputo y la ministra de Capital Humano, Sandra Pettovello.

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