El realismo mágico de Urbano Lugrís, en una completa antológica

El Círculo de Bellas Artes de Madrid y la Fundación Caixa Galicia se han unido para presentar una antológica del pintor y escritor gallego Urbano Lugrís (A Coruña, 1908-Vigo, 1973), con una selección de 65 obras del centenar de su producción marcada por el surrealismo, el realismo mágico, la metafísica y una "vocación oceánica" según el pintor Antón Patiño, comisario con Rosario Sarmiento de la exposición. Con motivo de la muestra se ha publicado en edición facsímile los 13 números de la revista Atlántida, editada y diseñada por Lugrís en los anos cincuenta.

"No me sorprende que Lugrís sea poco conocido porque la pintura gallega permanece sumida en un cierto oscurantismo, como entre brumas", declaró ayer el pintor Antón Patiño, que durante un año ha rastreado la vida y la obra de Lugrís, cuyo resumen publica en el catálogo. La exposición toma el titulo, Viaje alrededor de mi mundo, de una anotacion manuscrita de Lugrís para una autobiografía.El interés personal de Patiño, uno de los fundadores del Grupo Atlántica, se ha unido al proyecto de la Fundación Caixa Galicia de montar una retrospectiva a partir de su propia colección -que dirige la historiadora Rosario Sarmiento- y el préstamo de otros museos y particulares. La muestra se trasladará en el mes de diciembre al Auditorio de Galicia, de Santiago de Compostela.

El ancla

El montaje sigue con algunos cambios un orden cronológico, desde las primeras pinturas de los años cuarenta hasta su muerte. El mundo gallego y la mar -su firma siempre junto a un ancla- dominan las composiciones del pintor, que se traslada a Madrid en 1930. Entabla amistad con Dieste y García Lorca y colabora en las Misiones Pedagógicas con escenografías. La guerra civil modifica sus posiciones ideológicas, de las que apenas hay referencias personales, ya que es encarcelado por firmar un manifiesto en favor de la República y en la posguerra pinta murales para el yate Azor y el Instituto de Cultura Hispánica.

Patiño dice que la obra de Lugrís aporta singularidad y originalidad, cuyo reconocimiento tiene que empezar en el ámbito peninsular. "Es un artista que mantiene el realismo mágico desde los años treinta a los setenta, con una poética muy singular y una fidelidad a unos intereses casi familiares. En su vida y en su obra se cruzan influencias culturales novecentistas, románticas y populares. Es un pintor simbolista y conceptual, muy literario, que puede despertar una seducción tremenda y que para otros tenga una difícil asimilación"."Pinta en gallego, con un realismo idealizado, sin la belleza convulsa del surrealismo, donde se diluyen la realidad y la ficción". Con la muestra se ha editado en facsímile la revista Atlántida, con los 13 números aparecidos entre 1954 y 1956, con un estudio introductorio de César Antonio Molina.