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43º FESTIVAL DE BERLÍN

El director y el productor del filme español 'La vida láctea' discuten sobre su autoría

Tras la proyección del filme español La vida láctea en la sección Panorama, Juan EsteIrich, su director, y Eduardo Campoy, su productor, celebraron una conferencia de prensa en la que se enzarzaron de nuevo en su conocida y áspera discusión sobre el desarrollo del rodaje del filme y la finalización prematura y traumática de éste. El debate adquirió por momentos tensión y acrítud.

Juan Estelrich afirmó que el guión previsto está amputado en alrededor de un 20% en la película resultante de esa interrupción del rodaje. Por su parte, Eduardo Campoy argumenta que el director Estelrich no cumplió sus obligaciones industriales y creó graves tensiones en el equipo, lo que le obligó a ordenar la suspensión del rodaje, no por razones económicas sino por imposibilidad de continuarlo en aquellas condiciones.Estelrich acudió a la conferencia de prensa con una declaración escrita en la que afirmó no estar de acuerdo "con que esta película se proyecte tal como está en este festival, pues no es una película acabada, ya que falta de ella muchas escenas que no llegaron a rodarse y que son imprescindibles para la comprensión, la continuidad y la calidad de la película".

El director de La vida láctea afirmó más adelante que el número de escenas no llegadas a rodar o rodadas sólo en parte e imposibles de montar "es de 29, lo que supone alrededor de un 20% del total de la duración de la película". Por su parte, el productor Campoy considera que ese porcentaje no supera el 5% y que "ninguna de las escenas no rodadas afecta de manera decisiva a la calidad de la película, como demuestra que en su premontaje fuera aceptada por la dirección del Festival de Berlín para participar en la prestigiosa sección Panorama".

En este mismo sentido se pronunció la actriz protagonista de la película, la alemana Marianne Sagebrecht, quien considera que "una película no es obra exclusiva de su director, sino obra de todo un equipo".

Opiniones encontradas

La actriz, aunque señaló que le quedaron por rodar algunas escenas, se manifestó satisfecha con el filme tal como a quedado, al contrario que el actor Ignacio Vallejo Nájera, que dijo estar de acuerdo con el director Estelrich, y que el también actor Jack Taylor, que dijo con dureza: "Cuando ruedas una escena y te la cortan, eso es parte del juego; pero cuando no te dejan rodarla, eso ya no es parte del juego, sino pura y simplemente, como dicen los españoles, una putada".En sentido contrario, Eduardo Campoy argumentó: "No se interrumpió el rodaje por razones económicas, sino industriales. Mickey Rooney fue contratado por cuatro semanas y cuando las cumplió se fue, sin haber rodado todo lo que le correspondía. Marianne fue contratada por tres semanas y ella se prestó a rodar dos días más, pero ni así rodó lo previsto. El director no cumplió con los tiempos de estos contratos. Además, las tensiones creadas por el director con el equipo hizo prácticamente insostenible el trabajo. Ví que no cumplía su compromiso y decidí suspender el rodaje".

Estelrich añade a lo ya dicho por él: "Hoy se ha cometido aquí, en Berlín, un acto ilegal. Se ha proyectado una película que tiene interpuesta por mí una serie de medidas que impiden esa proyección, según la ley de Propiedad Intelectual". La discusión siguió en una espiral estéril sobre el filme evidentemente mutilado, pero que nos tememos que, en cualquier caso, tiene muy difícil arreglo. Lo que hay dentro de él es cine muy superficial, lleno de estampitas y de concepción almibarada y, en definitiva, mediocre.

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