SiIvio Rodríguez, Pablo Milanes y la "Nueva Trova" cubana

Silvio Rodríguez y Pablo Milanés, dos de los más lúcidos representantes de la Nueva Trova cubana, se encuentran en Madrid con motivo de una pequeña gira por España y que comenzarán los días 10 y 11 en la Villa.Hablamos con ambos a poco de su llegada. Parece que la Nueva Trova encierra en su nombre una determinada evolución y expansión de lo que se podría llamar Trova Tradicional. ¿Existió algún planteamiento de base para llegar a esta evolución? «Lo primero, antes de plantearnos especular sobre un aspecto rítmico o cosas así, fue el de un compromiso total con la revolución. Una alternativa política es, antes que nada, una alternativa cultural y la cultura también es política. En el desarrollo de nuestro trabajo es donde se encuentra la revolución, y no basta cantarla, sino que ello implica desde un principio tener una actitud renovadora respecto de la música y del texto.»

Pero, ¿no se puede echat en cara a la Nueva Trova un cierto elitismo, una cierta separación de las masas, que no llegarían a entender lo que se está haciendo?

«Los que así opinen, olvidan que ya en el año 61 hubo una campaña de alfabetización y que en la actualidad, la batalla se da en torno a grados de instrucción más elevados. También se olvida que un pueblo que ha sido protagonista más de una vez de momentos cruciales, no sólo para ellos, sino para el resto de la humanidad, ha tenido ocasión de dar saltos cualitativos muy importantes que le han llevado a una madurez intelectual y política mayor de lo que tal vez podía esperarse. Por otra parte, nosotros vemos fundamentalmente al artista como un ente educador, formador. Así, la responsabilidad del artista es muy grande y nosotros tratamos, en la medida de nuestras posibilidades, de asumir ese papel de formadores de nuestro pueblo. »

¿Cuáles son las vías que utiliza la Nueva Trova para llegar a sectores amplios de población?

«Bueno, en este momento la radiodifusión en Cuba, todavía se encuentra marcada por el gusto personal de los discotecarios. Entonces, muchas veces, ellos programan sin ningún espíritu crítico, poniendo música muy mala o superficial. Así ocurre que en Cuba no se conoce a los mejores cantantes españoles, sino a los peores. Pero a pesar de ello, a los de la Nueva Trova, nos llaman directamente de pueblos, de cuarteles, de fábricas, lo cual es un medio de difusión un poco primitivo, pero que teniendo en cuenta lo que antes decíamos, es el más efectivo.»