_
_
_
_
Columna
Artículos estrictamente de opinión que responden al estilo propio del autor. Estos textos de opinión han de basarse en datos verificados y ser respetuosos con las personas aunque se critiquen sus actos. Todas las columnas de opinión de personas ajenas a la Redacción de EL PAÍS llevarán, tras la última línea, un pie de autor —por conocido que éste sea— donde se indique el cargo, título, militancia política (en su caso) u ocupación principal, o la que esté o estuvo relacionada con el tema abordado

Viajar en el tiempo con las Campanadas

He visto, uno tras otro, los vídeos del anuncio de la llegada del año nuevo de TVE desde 1980 hasta 2022: fue un recorrido increíble

Jimina Sabadú
Anne Igartiburu y Ramón García brindando por el nuevo año 2015 en las campanadas de RTVE.
Anne Igartiburu y Ramón García brindando por el nuevo año 2015 en las campanadas de RTVE.

Hace casi un año me encerré sola y a oscuras para viajar en el tiempo. Vi, uno tras otro, los vídeos de las Campanadas de TVE desde 1980 hasta 2022. Fue un viaje increíble que ustedes pueden hacer sin gastar un euro. Cuarenta y dos años a través de otros tantos instantes. De quienes saludan a cámara en la Puerta del Sol en 1980 algunos serán ya sombras, recuerdos de los vivos que siguieron sin ellos. Otros se habrán jubilado. Algunos de ustedes no habrían sido concebidos aún.

En los primeros vídeos la realización de las Campanadas era sobria, y la locución profesional. Se nos hablaba sobre esa Europa por llegar. La propaganda en torno al sueño de la modernidad se verbalizaba a través de las quimeras de los Juegos Olímpicos y la Expo 92. Quizás fue ese error en las Campanadas de 1990 lo que hizo que los deseos de opulencia trocasen en la horterada y el pelotazo. Lentejuelas, escotes, pajaritas, y capas bejaranas. Quince años de Ramon García transmitiéndonos que, por mucho que cambien las cosas, él y Jordi Hurtado permanecerán inmutables. La inmensa euforia del cambio de siglo y de milenio. El año en el que Ramontxu se opuso a la voluntad popular al no decir “Feliz 2005″, impidiendo que los españoles saliésemos a la ventana a berrear la rima imbatible. Qué estampa perdió el mundo.

Junto a los recuerdos televisivos despertarán otros privados. Casas a las que no podremos volver. Amigos que dejaron de serlo. Juramentos de amor quebradizos como obleas. Riñas por una merluza o una palabra. Todos se evaporarán al final de las Campanadas. Al terminar el viaje le aseguro que se alegrará de que todavía haya alguien con quien pasar la Nochevieja. Al final lo que no se comparte, ¿de qué vale?

Puedes seguir EL PAÍS Televisión en X o apuntarte aquí para recibir nuestra newsletter semanal.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Sobre la firma

Jimina Sabadú
Columnista en la sección de Televisión. Ha colaborado en 'El Mundo', 'Letras Libres', 'El Confidencial', en programas radiofónicos y ha sido guionista de ficción y entretenimiento. Licenciada en Comunicación Audiovisual, ha ganado los premios Lengua de Trapo y Ateneo de Novela Joven de Sevilla. Su último libro es 'La conquista de Tinder'.

Más información

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_