_
_
_
_
Columna
Artículos estrictamente de opinión que responden al estilo propio del autor. Estos textos de opinión han de basarse en datos verificados y ser respetuosos con las personas aunque se critiquen sus actos. Todas las columnas de opinión de personas ajenas a la Redacción de EL PAÍS llevarán, tras la última línea, un pie de autor —por conocido que éste sea— donde se indique el cargo, título, militancia política (en su caso) u ocupación principal, o la que esté o estuvo relacionada con el tema abordado

Lo que RTVE necesita es buena almendra

Mientras se decide qué necesita RTVE, está bien que alguien tenga claro qué no necesita, pero hay que tener cuidado con estas introspecciones

El presidente de la Corporación RTVE, José Manuel Pérez Tornero, en una Comisión Mixta de Control Parlamentario de la Corporación RTVE y sus Sociedades el  29 de abril de 2021.
El presidente de la Corporación RTVE, José Manuel Pérez Tornero, en una Comisión Mixta de Control Parlamentario de la Corporación RTVE y sus Sociedades el 29 de abril de 2021.Sergio R Moreno (GTRES)
Sergio del Molino

Vino el director general de RTVE, José Manuel Pérez Tornero, a emular el otro día al personaje de Berlanga, el patriarca de la familia Planchadell y Calabuig, cuando se plantaba ante al gurú del marketing que iba a salvar su empresa gritándole: “Lo único que necesita el turrón es buena almendra”. Le faltó poner voz de Fernán-Gómez, pero estaba en el Congreso y no le debió de parecer oportuno el casticismo, aunque su alegato podría haber concluido: “Ni Cintoras ni Cintoros, lo que RTVE necesita es buena almendra”.

Más información
Jesús Cintora en su programa Las cosas claras, de La 1
El nuevo presidente de RTVE promete suprimir los programas de infoentretenimiento, como ‘Las cosas claras’

Mientras se decide qué necesita RTVE, está bien que alguien tenga claro qué no necesita, pero hay que tener cuidado con estas introspecciones: uno empieza preguntándose quién es y acaba respondiéndose “nadie” con relativa facilidad.

Yo quisiera una RTVE aburrida y profesional, de altísimas exigencias profesionales. Una RTVE que emplease a los boinas verdes del periodismo y donde quisieran trabajar los pata negra de la industria audiovisual. Una RTVE que se pareciera más a Radio Clásica que a la MTV. Una RTVE sin público, exquisita, repelente y ensimismada, ajena al ruido mundanal.

El propósito de esta RTVE no sería la audiencia, sino la doma del resto de canales privados. Sería el metro de platino, la unidad de medida de todas las teles y las radios. Cuanto más se alejasen estas de las formas aristocráticas de RTVE, más plebeyas y soeces se presentarían ante el pueblo. Habría una escala objetiva y un término de comparación que mantendría a muchos canales dentro de los límites del pudor. Nada les impediría salirse de ellos, como nada impide a un comensal eructar en una cena de gala, pero no habría coartadas para el mal gusto. Lo podrían ejercer en libertad, a la madrileña, como dice Ayuso, pero exponiéndose en la comparación con quienes mastican con la boca cerrada y piden las cosas por favor.

Puedes seguir EL PAÍS TELEVISIÓN en Twitter o apuntarte aquí para recibir nuestra newsletter semanal.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Sobre la firma

Sergio del Molino
Es autor de los ensayos La España vacía y Contra la España vacía. Ha ganado los premios Ojo Crítico y Tigre Juan por La hora violeta (2013) y el Espasa por Lugares fuera de sitio (2018). Entre sus novelas destacan Un tal González (2022), La piel (2020) o Lo que a nadie le importa (2014). Su último libro es Los alemanes (Premio Alfaguara 2024).

Más información

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_