Gina Prince-Bythewood: “Cada historia contada por una persona de color abre la puerta a las demás”
La directora estrena 'La vieja guardia' en Netflix, una película de superhéroes con protagonista negra y secundarios gais
“Quiero contar historias de mujeres negras. Son las más difíciles de contar”, explica Gina Prince-Bythewood, la cineasta que en 2000 firmó el éxito indie negro Love & Basketball y lleva desde entonces detrás detrás de la fórmula de hacer más cine de ese estilo. “Es ya una lucha de 20 años, pero quiero seguir. Quiero poner a las mujeres negras en la pantalla. Que se las escuche, que se las ame. Conozco el poder que tiene el cine. Sé lo que podemos conseguir”.
A lo largo de esas dos décadas, Prince-Bythewood ha dirigido y escrito cine y televisión de todo tipo, de un indie político a directamente televisión de superhéroes de Marvel, para mantenerse en activo pese a estar en lo más bajo de la cadena alimenticia de Hollywood: directora mujer y negra, la mayor rareza de Los Ángeles. Esta semana estrena en Netflix La vieja guardia, sobre una logia de guerreros que no mueren y, por lo tanto, se han pasado los últimos 60 siglos luchando contra todo aquello que consideran el mal.
Tiene toda la pinta de una película de superhéroes: adapta un cómic, tiene una estrella al frente (Charlize Theron, como la cabecilla de la banda) y de vez en cuando se deja abierta una puerta para posibles secuelas. Sin embargo, al igual que su directora, la cinta es una rara avis. Esta es la única película de superhéroes con una pareja gay en el reparto; una que además tiene más trama que el hecho de ser gay. Está protagonizada por una mujer negra, KiKi Layne, en el papel de una soldado que hereda la inmortalidad. Y está, obviamente, dirigida por otra. “No siempre una mujer tiene la oportunidad de dirigir cine de este género”, explica Prince-Bythewood. “Cuando Patty Jenkins dirigió Wonder Woman en 2017, creo que cambió las normas. La puerta se entreabrió. En 2018, me apunté a dirigir el primer capítulo de un serie de Marvel, porque quería seguir esa estela. Luego me ofrecieron dirigir esta película, que no solo se va a estrenar en 180 países a la vez, sino que tiene a dos mujeres de protagonistas”.
Nadie podía haber previsto que La vieja guardia saldría tras más de un mes de protestas de Black Lives Matter, centradas en la igualad racial en EE UU. Prince-Bythewood ha participado muy sonoramente en ellas: ser directora negra en Hollywood es una rara avis. “Ha habido un cambio. La gente ha empezado a admitir lo que llevamos años gritándoles: que a los negros se nos muestra menos humanidad. Que nuestra raza se convierte en un arma contra nosotros. Mucha gente, gente con poder, ha visto hasta qué punto eran cómplices de este sistema. No todos querrán cambiar las cosas, claro. Cuando has pasado la vida entera en el privilegio, la igualdad te parece opresión. Pero para que llegue el cambio hay que ceder un poco de poder. Eso es lo que hará del mundo un lugar mejor. ¿Qué queda? Que nos dejen contar nuestras historias. Que esto no sea solo un viaje turístico hacia nuestro mundo. Cada historia contada por una persona de color abre más la puerta para otras”.
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