Los emoticonos se renuevan

¿Por qué gastar tiempo juntando letras cuando basta con mandar un corazón? Desde la llegada de WhatsApp y el acceso directo a estos iconos su popularización ha sido imparable. No eran una novedad, existían desde finales de los 90, pero apenas se utilizaban fuera de Japón. Los emojis, como allí se denominan, se duplicarán en el mes de julio. Tendrán 250 más y 240 con banderas de naciones.

Estos iconos forman parte del código Unicode, un estándar creado por la industria informática para poder usar caracteres con diferentes grafías sin que se den incompatibilidades entre sí. Es lo que hace que, por ejemplo, se pueda cambiar el idioma de un teclado o poner signos árabes o hebreos sin crear alteraciones en los programas informáticos.

El consorcio, del que forman parte Apple, Microsoft, Adobe, Google, Yahoo o la Universidad de Berkeley, se reunió por primera vez en 1990. Desde entonces tienen reuniones periódicas. Con la irrupción de los móviles en Japón y la posibilidad de mandar mensajes SMS se creó una lista, impulsada por la operadora NTT Docomo con 172 iconos. Después se fue ampliando hasta los 250 actuales, que datan de 2010, cuando se lanzó la actualización 6.0. Se confunden quienes pedían a WhatsApp la inclusión de más dibujos, pues poco tienen que ver con ello. La versión 7.0 se liberará en el mes de julio.

El consorcio ha publicado una tabla en la que se distinguen los iconos actuales de los nuevos, resaltados en amarillo. ¿Desaparece la bailarina del vestido rojo? No, los actuales siguen, pero muchos quizá sigan sin utilizarse. Una de las quejas más comunes pasaba por contar con demasiados dedicados a la comida asiática. Había noodles y sushi, pero poco occidental. No es un gran avance pero por fin hay un plato con cuchillo y tenedor. Aparecen referencias a deportes que ahora no se contemplan: levantamiento de pesas, golf, motociclismo y carreras de coches.

Solo hay un nuevo animal, una ardilla. La meteorología gana. Aparecen nuevos lugares a los que referirse: desierto, isla con palmera, parque, camping y estadio. El capítulo espiritual se completa con la cruz latina o la paloma de la paz.

Entre los objetos de uso cotidiano llama la atención que incluyan la cámara de fotos con flash, cuando ya había una cámara, una araña y una tela de araña, un joystick, ordenador de escritorio, teclado, una impresora o una daga.

El que más polémica ha levantado es el que se esconde bajo el código 1F595, puño cerrado y dedo corazón levantado. Traducido, la popular ‘peineta’ convertida en icono para enviar en cuestión de segundos. Difícil de argumentar, pero con uso a medida de la educación del emisor.

La inclusión de los mismos en los móviles no dependerá tanto de los usuarios como de Google, Apple y Microsoft, con actualizaciones de sus móviles y ordenadores. Aunque su apariencia será diferente según el aparato. Las tres firmas los adaptan a su estética. De ahí que los iconos de Gmail no sean los mismos que aparecen cuando se publica el mismo en Twitter. La actualización para aparatos que no sean de última generación dependerá también de estas tres grandes firmas.