Las búsquedas desde el móvil también deben ser más inteligentes

Google sigue siendo el rey indiscutible de las búsquedas, con alrededor de dos tercios del mercado. Pero la naturaleza de las mismas está cambiando, sobre todo ahora que más gente busca lo que quiere comprar, comer o aprender a través de dispositivos móviles. Esto ha situado el sector de las búsquedas, con un valor de 22.000 millones de dólares, en la encrucijada más importante desde su invención.

“Lo que quiere la gente es formular una pregunta sencilla y obtener una respuesta sencilla”, explica Oren Etzioni, catedrático de la Universidad de Washington y cofundador de empresas de búsquedas para realizar compras y adquirir billetes de avión. “Queremos conocer el restaurante de sushi más cercano y hacer una reserva inmediata”.

Según Google, existen 30 billones de direcciones web, en comparación con un billón hace cinco años. Y ahora, los usuarios esperan que los ordenadores y teléfonos sean más inteligentes. Muchas iniciativas nuevas son servicios que la gente ni siquiera considera motores de búsqueda.

Amazon, por ejemplo, se ha hecho con un porcentaje más elevado que Google en las búsquedas para realizar compras, que es el tipo más lucrativo. En páginas como Pinterest y Polyvore, los usuarios han seleccionado sus cosas favoritas de toda la Red para arrojar resultados cuando busquemos, por ejemplo, “vestido de encaje”.

En los teléfonos inteligentes, la gente recurre directamente a aplicaciones como Kayak o Weather Underground. Otras envían información útil, como el estado del tráfico o retrasos en los vuelos, antes incluso de que la soliciten.

Se utiliza YouTube para buscar cosas como la forma de hacer un nudo de corbata, Siri para realizar búsquedas con el iPhone, mapas de Internet para encontrar lugares en un municipio y Facebook para consultar cosas que a gustan a los amigos.

Servicios como LinkedIn Influencers y Quora intentan convertirse en motores de búsqueda diferentes, lugares donde encontrar contenido de calidad y experto, para no tener que escarbar en la Red. En Quora, preguntas como “¿qué se siente al trabajar para Steve Jobs?” son respondidas por personas con un conocimiento de primera mano, algo que Google no puede aportar.

La promesa de la búsqueda es tan grande que, aunque Microsoft pierda miles de millones de dólares cada año con Bing y no haya logrado hacer mella en la cuota de mercado de Google, sigue adelante. Según la empresa —que en febrero contaba con un 17% del mercado y con un 26% si se incluyen las búsquedas que proporcionó para Yahoo—, concibe la búsqueda como algo esencial para el resto de sus productos, desde la Xbox hasta los teléfonos. Y se puede ganar mucho dinero siendo el número dos.

Se aprecian algunos signos de que las conductas a la hora de realizar búsquedas están cambiando. Las realizadas en servicios tradicionales, dominados por Google, disminuyeron un 3% en la segunda mitad de 2012, después de aumentar durante años, según comScore, y el número por usuario se redujo un 7%. Por el contrario, las efectuadas en páginas temáticas, conocidas como motores de búsqueda verticales, se incrementaron un 8%. Este año, se espera que el gasto en publicidad en los motores de búsqueda tradicionales crezca más lentamente que en la Red en su conjunto, lo cual supone una inversión de la tendencia.

Google está realizando más cambios en sus ofertas de búsqueda y a un ritmo más rápido. “Lo que está empezando a hacer Google es compartir parte del conocimiento del mundo que los humanos guardan en su mente”, señala Ben Gomes, miembro de la empresa, “para que los usuarios puedan empezar a comunicarse con Google de una manera más natural”. En el futuro, Google podría responder preguntas más complicadas, añade Gomes, como por ejemplo “qué distancia hay de aquí a la torre Eiffel” o “en qué lugar puedo asistir a un concierto con un clima templado el año que viene”.