Un ZTE cómodo y ágil

ZTE será este año el tercer fabricante mundial de smartphones tras Samsung y Apple. Esos dos gigantes destacan por sus móviles de alta gama, aunque Samsung dispone de un mayor abanico de posibilidades. La china ZTE se ha centrado en ofrecer modelos de precios bastantes más bajos, lo que no quiere decir de inferior calidad. En este modelo Skate Pro la cámara de fotos es de 5 gigas y la pantalla de 4 pulgadas, con una velocidad wifi y de 3G de 7,2 megas de descarga y 5,7 de subida.

En la práctica es un teléfono muy funcional; a diferencia de la tendencia a la virtualidad, los cuatro botones principales (menú, uinicio, retroceso y búsqueda) siempre están visibles en el modelo lo que, se diga lo que se diga, es más cómodo. Eso es a costa de quitar espacio al tamaño de la pantalla, pero aún así son 4 megas, nada desdeñables.

Funciona con sistema Android 4.0. Una vez más se comprueba el daño que ha hecho Google a Apple, dejando gratis este sistema operativo a los fabricantes. Steve Jobs solo se revolvió contra su amigo Eric Schmidt cuando vio que Google planeaba un alternativa a su iOS, no cuando sacaron el buscador o el navegador o su sistema publicitario que arrolla en el sector. El enemigo era Android, y acertó. Aquí se muestra una vez más. Cambiar de móvil siempre es un pequeño trauma. Los acérrimos a un iPhone o a un Mac no quieren conocer nada más, porque entienden a Apple, entienden su sistema operativo, su sistema de funcionar y bien. Esa gran ventaja se ha acabado en gran parte con la llegada de Android, ya puedes cambiar de móvil, de modelo, de marcas, pero si el sistema es el mismo, en este caso Android, no hay trauma, no se extraña el cambio; el funcionamiento sigue igual que aquel móvil que se ahogó en la piscina y al que tanto añoraba. Hasta la llegada de Android, los fabricantes tenían que lidiar con ese obstáculo que, en algunos casos, fue mortal, como con Nokia, con los mejores aparatos, pero con un software infernal, más evidente cuando surgió la alternativa del iPhone en 2007.

ZTE se aprovecha de Android, incorpora además ya de entrada, por imposición, los servicios básicos de Google. Ahora los fabricantes solo se tienen que preocupar de ofrecer un móvil bien hecho, cómodo y a buen precio. El software lo garantiza Google.

El Skate Pro de ZTE es un ejemplo excelente de la simbiosis de un software universal, Android, y de unos fabricantes que cada vez cuidan más la estética, el defecto que antes se les atribuía. Ahora su línea no es espectacular, pero no desentona. Y en cuanto a precio, imbatible. Por 180 euros se tiene un smartphone de garantías, cómodo y ágil. La mayoría de los consumidores no necesita más.