Netsky supera los 40 millones de correos infectados en España

La versión 'P' del gusano informático Netsky prosigue su difusión en Internet y ya ha superado los 40 millones de correos electrónicos infectados en España desde que apareció a finales de marzo. Estos datos suponen que, en la actualidad, uno de cuatro correos electrónicos españoles tienen virus.

La versión 'P' del gusano informático Netsky prosigue su difusión en Internet y ya ha superado los 40 millones de correos electrónicos infectados en España desde que apareció a finales de marzo, según los datos del Centro de Alerta Temprana sobre Virus y Seguridad Informática (CAT), órgano dependiente del Ministerio de Industria, Turismo y Comercio.

Así, la red de sensores del CAT ha detectado en algo menos de cuatro meses 40,4 millones de copias de Netsky.P, muy por delante del segundo clasificado, la variante 'B' del mismo gusano, que ha sido localizada en casi veinte millones de copias a pesar de que apareció un mes antes. Sin embargo, su propagación se mantiene estable en los últimos meses, sin que haya bajado de forma notable. De hecho, en las últimas 24 horas es el responsable de más de la mitad de las infecciones de virus en la Red española, apareciendo en 460.755 mensajes electrónicos, por delante de Netsky.B (135.000 copias, 15% del total).

Estos datos suponen que, en la actualidad, uno de cuatro correos electrónicos españoles tienen virus. En concreto, de los casi 3,9 millones de e-mails analizados por el CAT en el último día, el 23,6% (917.000) tenían algún tipo de código malicioso.

Aunque la epidemia de variantes del Netsky parece haberse detenido -la última, la número 29, fue detectada el 4 de mayo-, lo cierto es que entre los diez virus más difundidos en Internet en España durante el último año figuran seis versiones de este virus

Archivo adjunto en inglés

El gusano suele llegar en un archivo adjunto y utiliza una antigua vulnerabilidad (MIME header vulnerability) del navegador Internet Explorer en versiones anteriores a la seis, que permite su ejecución con sólo leer el mensaje o visualizarlo en el panel de vista previa, aunque también se propaga a través de redes de intercambio de archivos P2P, como KaZaA.

Una vez abierto el correo, el gusano se envía automáticamente a todas las direcciones de correo electrónico contenidas en el sistema infectado, para lo que se sirve de su propio motor de envío SMTP. Las características del mensaje son variables, aunque siempre aparecen en inglés, y el remitente aparece falsificado.