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El Departamento de Justicia de EE UU demanda a Texas al considerar que su ley del aborto es inconstitucional

La polémica norma prohíbe interrumpir el embarazo después de la sexta semana

Yolanda Monge
fiscal general Merrick Garland anuncia una querella contra Texas por ley aborto
El fiscal general Merrick Garland anuncia una querella contra Texas, este jueves.J. Scott Applewhite (AP)

El Departamento de Justicia de Estados Unidos ha presentado este jueves una demanda contra el Estado de Texas por la polémica ley que prohíbe interrumpir el embarazo después de seis semanas de gestación. En rueda de prensa, el fiscal general, Merrick Garland, declaró que “la norma es claramente inconstitucional como prueban precedentes de la Corte Suprema”. Texas ha aprobado esa ley para “desafiar a la Constitución”, se lee en la demanda.

“El Departamento de Justicia tiene la obligación de defender la Constitución de Estados Unidos y el Estado de derecho”, prosiguió el fiscal general. Garland también criticó el hecho de que la nueva legislación haga responsables de que se cumpla la ley a los ciudadanos que presten ayuda a una mujer “por ejercer sus derechos constitucionales”.

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FILE - In this Sept. 1, 2021 file photo, women protest against the six-week abortion ban at the Capitol in Austin, Texas. Even before a strict abortion ban took effect in Texas this week, clinics in neighboring states were fielding more and more calls from women desperate for options. The Texas law, allowed to stand in a decision Thursday, Sept. 2, 2021 by the U.S. Supreme Court, bans abortions after a fetal heartbeat can be detected, typically around six weeks. (Jay Janner/Austin American-Statesman via AP File)
Texas, el epicentro de la guerra contra el aborto en Estados Unidos
La portavoz de Biden, a un periodista que cuestionaba el aborto: “Usted nunca ha estado embarazado”

El pasado día 1 de septiembre entró en vigor la ley que supone el más duro revés para el aborto en Estados Unidos desde hace casi 50 años. La Casa Blanca dejó desde el principio clara su postura. Para el presidente, Joe Biden, la norma vulnera los derechos de las mujeres. La reacción del Departamento de Justicia dirigido por Garland llegaba este lunes, cuando anunció que el Gobierno federal se encargaría de proteger a las clínicas abortistas en caso de que sufrieran ataques.

Bajo la lupa de la Administración Biden está también lo que la Casa Blanca ha criticado como el espíritu de persecución del texto, ya que limita el papel de las autoridades en la vigilancia, pero, en cambio, permite a “cualquier persona” demandar a mujeres, médicos o a quien auxilie en la interrupción de un embarazo (con recompensas de hasta 10.000 dólares, unos 8.400 euros).

“Este tipo de argucia que anula la Constitución de EE UU es a lo que deberían de temer todos los estadounidenses, independientemente del partido al que pertenezcan”, aseguró el fiscal general. Garland advirtió de que el elemento de la norma que alienta a los cazarrecompensas puede llegar a convertirse en un modelo a copiar para otros Estados “sobre otros derechos constitucionales”.

La portavoz del gobernador de Texas (Greg Abbott) defendía la norma y acusaba a la Administración Biden de actuar por motivos políticos, con el fin último de distraer a los ciudadanos de temas más importantes, como la salida de Afganistán o el continuo flujo de migrantes en la frontera sur del país. “Tenemos fe en que los tribunales mantendrán la ley y protegerán el derecho a la vida”, declaró Renae Eze en un comunicado.

La cruzada contra el aborto mantenida por los conservadores lograba una gran victoria la semana pasada, cuando el Tribunal Supremo decidió no frenar la ley conocida como la ley del latido (Texas heartbeat, como se llama a la norma), y convertía prácticamente en papel mojado el derecho al aborto en ese Estado.

Una docena aproximada de Estados prohíben el aborto después de las seis semanas de embarazo. Pero diferentes jueces del circuito federal han impedido hasta la fecha que entraran en vigor estas normas, ya que consideraban incompatibles con Roe contra Wade, la decisión de la Corte Suprema de 1973 que garantiza el derecho a interrumpir un embarazo antes de que el feto sea viable, lo que se traduce en aproximadamente unas 22 a 24 semanas.

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Sobre la firma

Yolanda Monge
Desde 1998, ha contado para EL PAÍS, desde la redacción de Internacional en Madrid o sobre el terreno como enviada especial, algunos de los acontecimientos que fueron primera plana en el mundo, ya fuera la guerra de los Balcanes o la invasión norteamericana de Irak, entre otros. En la actualidad, es corresponsal en Washington.

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