El congreso de teólogos afea a los obispos su afán de riqueza por las inmatriculaciones
“La jerarquía católica contraviene el mandato de Jesús de no acumular tesoros y se coloca del lado del neoliberalismo”, dice su manifiesto
La Asociación de Teólogos Juan XXIII criticó a los obispos por las inmatriculaciones realizadas durante décadas (34.962, exactamente) en su 40º Congreso de Teología, celebrado de forma telemática desde el viernes y hasta ayer. “Con la apropiación de esas decenas de miles de bienes, la jerarquía contraviene el mandato de Jesús de no acumular tesoros en la tierra, hace oídos sordos a la petición de que devuelva dichos bienes al pueblo y se coloca del lado del neoliberalismo que mata”, acusa el manifiesto con el que la asociación clausuró el evento.
La organización afeó también a la Conferencia Episcopal Española (CEE) su presencia en los impresos de las declaraciones de la renta. “Con la asignación tributaria destinada solo a la Iglesia católica, que este año ha recibido 301,7 millones por ese concepto, la jerarquía se apropia de un dinero que debería destinarse a fines sociales”, señala el texto.
El lema del congreso, El neoliberalismo mata: No se puede servir a Dios y al dinero, estaba basado en palabras de Jesús de Nazaret, en la afirmación del papa Francisco sobre “la economía de la exclusión y de la iniquidad que mata” y en la calificación de Pedro Casaldáliga del neoliberalismo como “la gran blasfemia” del siglo XXI. “Hemos analizado las situaciones de injusticia estructural, pobreza extrema, desigualdades crecientes, violencia de género, discursos y prácticas de odio contra personas inmigrantes, refugiadas y desplazadas, LGTBI y el deterioro del planeta. Buena parte de estas situaciones son consecuencia del neoliberalismo, que es injusto en su raíz y en sus consecuencias, sobre todo en el sur global”, afirma el primer punto del manifiesto.
La teóloga feminista brasileña Nivia Ivette Núñez de la Paz, profesora de la Universidad Internacional Iberoamericana, planteó propuestas frente al neoliberalismo patriarcal. “Las mujeres forman parte de los bienes intercambiables y son objetos regalados de unos hombres a otros. Sus cuerpos se ofertan en mercados al alza como el de la prostitución, los vientres de alquiler y la pornografía. Sexo y mercado están deviniendo más compañeros que nunca. El neoliberalismo económico en alianza con el patriarcado se convierte en neoliberalismo sexual. Tamaña alianza ha desembocado en odio hacia la vida de las mujeres con el resultado de decenas de miles de feminicidios”, concluye el manifiesto a partir de ese debate. Según los congresistas, existe una alianza entre el neoliberalismo económico y el patriarcado religioso, “a la vista de la discriminación y la violencia de género, ejercidas por las jerarquías religiosas, en nuestro caso por la jerarquía católica, que niega a las mujeres el reconocimiento de sujetos morales, eclesiales, teológicos y sus derechos sexuales y reproductivos”.
La reflexión sobre el texto evangélico que da título al congreso estuvo a cargo, como lección de clausura, del teólogo y profesor José Arregi, con este reto: O Dios o el dinero: contra el neoliberalismo en la óptica de Jesús. Franciscano durante 47 años, abandonó la congregación, el santuario guipuzcoano de Aránzazu y el sacerdocio cuando el obispo de San Sebastián, José Ignacio Munilla, le retiró sin contemplaciones la licencia canónica. El manifiesto recoge sus críticas a la defensa y mantenimiento por los obispos de los privilegios económicos, fiscales, educativos, culturales e incluso militares “que incumplen”, dijo, “la exigencia de Jesús a sus seguidores de no llevar bolsa, ni alforja ni calzado”.
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