Los destinos de veraneo celebran la apertura, pero advierten: “Es fundamental la luz verde de Londres”

El presidente Pedro Sánchez ha lanzado este viernes desde Fitur, la gran feria del turismo en Madrid, un mensaje de reapertura al mundo. Reino Unido y Japón se han incluido en la lista de países cuyos residentes no se ven afectados por la restricción temporal de viajes no imprescindibles a la Unión Europea. Los británicos podrán entrar en el país sin restricciones a partir del lunes 24 de mayo. Y los ya vacunados con la pauta completa de todo el mundo también podrán viajar por el país sin cortapisas a partir del 7 de junio. La noticia ha sido celebrada en los principales destinos vacacionales, deseosos de recuperar una actividad paralizada por la pandemia.

Costa del Sol: “Esto permitirá pronto la recuperación del empleo”

Tras muchos meses con los hoteles cerrados, la mitad de la planta hotelera de la Costa del Sol ya ha abierto sus puertas y se prevé que la cifra aumente en poco tiempo. El litoral ha revivido tras el adiós al estado de alarma, y en las dos semanas transcurridas desde entonces las reservas se han disparado en los hoteles ―la media rondaba el 40% el pasado fin de semana, pero algunos llegaron al 100%― y el sector de la restauración también está volviendo al ritmo habitual. “Pero por ahora es solo sábados y domingos y a la hora del almuerzo. Necesitamos más turismo”, cuenta Manuel Villafaina, presidente de la Asociación de Empresas de Playas, que reúne a más de 400 chiringuitos en el litoral malagueño. Cerca del 90% de ellos han permanecido cerrados durante el estado de alarma, pero la mayoría ha vuelto a subir la persiana ante el incremento de turistas andaluces y nacionales, lo que, sumado a la llegada de turistas internacionales, “permitirá pronto la recuperación del empleo”.

El turismo británico es básico para el sector en la Costa del Sol. Hasta el inicio de la pandemia, representaba un tercio de los viajeros que llegaban al aeropuerto de Málaga. Por eso, hoteles, restaurantes y chiringuitos están deseando escuchar de nuevo hablar en inglés. “La noticia es muy positiva”, afirma Margarita del Cid, consejera delegada de Turismo Costa del Sol, que pide, eso sí, “cautela”. “Hemos abierto la puerta, pero ahora necesitamos el respaldo del Gobierno del Reino Unido para que los ciudadanos puedan venir sin restricciones”, subraya. La responsable ha presentado esta semana en Fitur la campaña impulsada por la Diputación Provincial de Málaga en Madrid para promover tanto la costa como el interior malagueño como destinos turísticos, después de que en 2020 la provincia perdiera 9,3 millones de turistas ―2,2 millones de ellos, británicos― y más de 10.000 millones de facturación. “Resulta absolutamente imprescindible lograr luz verde en el semáforo británico a la mayor brevedad”, insiste Javier Frutos, presidente de la Asociación de Hosteleros de Málaga (Mahos).

Del Cid asegura que la llegada de vacunados a partir del 7 de junio será también importante. “Esperamos que afecte muy positivamente”, afirma, pero cree que las nuevas medidas deberían haberse anunciado “con antelación”. “Los destinos turísticos y las comunidades autónomas hemos pedido durante meses que tuviésemos una ruta clara, pero todo ha sido improvisado y confuso”, apunta Del Cid, también diputada por el Partido Popular en la Diputación Provincial y que cree que los efectos no se podrán ver realmente hasta pasado el 7 de junio. “Habrá que esperar”, señala con cautela.

José Carlos Martín, concejal de Turismo de Mijas (Málaga, 82.742 habitantes) cree que la llegada de personas vacunadas en junio “es un paso más que suma”, como también sumará el pasaporte sanitario europeo para la recuperación del turismo. “Hace falta la certidumbre de que cualquiera que quiera viajar lo puede hacer”, ha asegurado. Mijas tiene entre sus principales mercados emisores a los asiáticos ―japoneses o coreanos, entre ellos― y los turoperadores les ha comunicado que “allí la vacunación va más despacio, lo que se convierte en un problema aquí”. “Nosotros hemos hecho nuestra parte, pero hasta que los demás países no hagan lo mismo, la recuperación será lenta”, ha indicado.

Málaga es, de momento, la única provincia andaluza que se encuentra completamente en nivel 1, que mantiene aún ciertas restricciones, pero que supone el paso previo a la normalidad.

Barcelona: “No nos interesa cuántos turistas, sino qué tipo de turistas”

A finales de abril, el anuncio de la Comisión Europea recordando a los Estados que permitieran la entrada de visitantes estadounidenses vacunados ya provocó un verdadero tsunami de optimismo en las empresas turísticas de la capital catalana donde, después del turismo nacional, los estadounidenses son los visitantes que más se hospedan y más dinero dejan en la ciudad. Turismo de Barcelona ya anunció entonces misiones estratégicas de promoción turística a la ciudad. Su directora, Marian Muro, vaticinó que había que intentar volver a seducir a los visitantes estadounidenses pero también franceses e ingleses.

Aún así, a los primeros a los que se ha intentado “seducir” ha sido a los rusos. Una comitiva del consorcio de turismo se desplazó a principios de abril a Moscú y San Petersburgo para promocionar la ciudad con la misión de intentar incrementar en un 10% las visitas de turistas rusos a la ciudad. “Esto es una carrera. Después de un año de pandemia es ahora cuando todas [las destinaciones] vamos a salir a buscar visitantes. En Barcelona no nos interesa cuántos turistas van a venir sino qué tipo de turistas. Hemos de buscar”, advertía entonces. En 2019, Barcelona recibió a 195.450 ciudadanos rusos, lo que representa el 2,1% de la cuota de mercado, y estos realizaron 486.785 pernoctaciones, con una media de estancia en Barcelona de 2,5 noches.

Los turistas procedentes del Reino Unido son básicos para la industria turística de Barcelona. El pasado 2019, un año antes de la declaración de la pandemia, se alojaron en hoteles de la capital catalana 763.627 turistas británicos, según el informe de la actividad turística de Barcelona. Fue la tercera procedencia en cuanto a número de alojamientos, solo superada por los 1.612.487 turistas procedentes de otros puntos de España y los 1.103.996 de Estados Unidos. Los alojamientos de británicos en hoteles de la ciudad suponen el 8%, por delante de visitantes vecinos como los franceses o italianos. Turismo de Barcelona asegura que esta nacionalidad es estratégica para los empresarios turísticos de la ciudad.

La consejera de Salud de la Generalitat, Alba Vergés, ha destacado este viernes que toda Cataluña está preparada para recibir turistas e incluso, “si todo va bien”, hay previsión de que en verano no haya que llevar mascarilla al aire libre.

Comunidad Valenciana: “Están deseando venir, no les han dejado entrar en los pubs y están hartos de la lluvia”

La Comunidad Valenciana será una de las que más rápido notará los beneficios de la apertura de fronteras para los turistas británicos, asegura Nuria Montes, secretaria general de la patronal hotelera de Benidorm (Hosbec). La provincia de Alicante es la colonia más numerosa de británicos en España, con 70.000 residentes. El mercado británico acapara un tercio del turismo internacional de esta autonomía. Según los datos que maneja el sector, el 89% de los viajeros procedentes del Reino Unido que pisan la Comunidad Valenciana eligen Alicante y, de ellos, la mitad pasa sus vacaciones en Benidorm. “En un año normal”, puntualiza Montes, “por el aeropuerto de Alicante-Elche pasan tres millones de británicos”.

Bélgica, Países Bajos, Francia y Portugal, mercados de turistas puros, junto a los alemanes, que optan más por ser residentes, complementan un tejido económico para el que se confía, especialmente, en el pasaporte sanitario que se establecerá en julio. “Es importante que sepan que el sector turístico valenciano está preparado para recuperar la movilidad”, subrayan fuentes autonómicas. “Se les espera con los brazos abiertos”, anuncia Ximo Puig, presidente de la Generalitat Valenciana, porque “no tienen ningún destino mejor” en datos de incidencia de la pandemia.

Los turistas de la UE han sido, tradicionalmente, los que han ayudado a estabilizar el mercado, ya que tienen “mayor disponibilidad fuera de temporada”, recuerdan las mismas fuentes. En esta ocasión, además, contribuirán a que el sector hotelero vuelva a funcionar. “Si el mercado británico y el europeo funcionan bien”, comenta Nuria Montes, de Hosbec, “llegaremos a verano con casi todo abierto”. En Benidorm, que aglutina el grueso de la planta hotelera autonómica, el porcentaje actual de planta abierta es del 35%. Para junio, se espera que se eleve al 50%, prevé Montes. Pero con los índices de vacunación de julio y la llegada de ingleses y portugueses, el segundo mercado de la provincia de Alicante en verano, las perspectivas se acercan mucho a la antigua normalidad.

El secretario autonómico de Turismo, Francesc Colomer, señala que han buscado “todas las alianzas posibles” para conseguir que el Reino Unido admita visitantes sin cuarentenas ni PCR. A su juicio, “una vez dinamizado el mercado nacional con el levantamiento del cierre perimetral”, esta medida será “el detonante para la revitalización del tejido productivo” en el sector. Una visión que comparte el jefe de la Generalitat valenciana, Ximo Puig, quien destaca que los datos de incidencia de coronavirus en esta comunidad la convierten en el “destino más seguro de Europa”. Puig, que se reunirá el lunes con el embajador británico en Madrid, Hugh Elliott, augura que la recuperación del turismo logrará que la Comunidad Valenciana sea “una de las regiones europeas que más crezca en los próximos meses”.

Mientras tanto, los británicos de Benidorm han recibido el anuncio como “un notición”, dice la periodista Michelle Baker. “Están deseando venir”, manifiesta sobre sus paisanos, “están hartos del clima, no les han dejado entrar en los pubs hasta hace una semana y nadie quiere estar en una terraza con lluvia”. En su opinión, la economía de la capital turística alicantina “necesita el poder adquisitivo de los británicos”, que han ahorrado el dinero destinado a vacaciones durante año y medio y que encontrarán una ciudad “muy cambiada, ya que se ha invertido mucho en urbanismo durante la pandemia”. Pero advierte: “Deberían solicitar PCR a los que vengan porque en el Reino Unido están creciendo alarmantemente las cifras de la cepa india”.

Baleares: “Esto era muy necesario para reactivarnos”

El anuncio del Gobierno central ha sido acogido como una buena noticia por el sector empresarial hotelero de las islas. “Son medidas ampliamente demandadas por la Agrupación de Cadenas Hoteleras de Baleares y por la Federación Hotelera de Mallorca”, ha señalado la vicepresidenta ejecutiva de la patronal, María José Aguiló.

La llegada inminente del turismo británico es particularmente importante. En 2019, el último antes de la pandemia, visitaron las islas más de 3,6 millones de viajeros del Reino Unido, una cifra que bajó a 150.843 el año pasado. Los hoteleros siguen a la espera, sin embargo, de que se produzca el ansiado movimiento de Londres de situar a España en la posición verde de su semáforo. “Es un país relevante para el archipiélago. El levantamiento de esta restricción era muy necesario para reactivarnos con el mercado británico y más si el 7 de junio se anunciara que Baleares pasa a la posición verde del semáforo, que es en lo que confiamos”, añade Aguiló.

En la islas todavía queda mucho camino para la apertura total de la planta hotelera, ya que actualmente apenas hay un 30% de los establecimientos abiertos, alrededor de 230, cuando antes de la pandemia la apertura por estas fechas superaba el 90%. “La armonización de medidas en la UE se ha venido reclamando desde hace meses por parte de las patronales y lo deseable hubiera sido contar antes con estos mecanismos”, subraya Aguiló. La presidenta del Gobierno regional, Francina Armengol, también ha manifestado su satisfacción por lo que ha calificado de “buenas noticias” que permitirán a las islas avanzar hacia la reactivación “impulsando una movilidad y un turismo seguro”.

Canarias: “Aquí vienen turistas de clase media, y el coste de las pruebas para una familia normal es inasumible”

En Canarias, la noticia ha sido recibida con agrado por los hoteleros. Pero, respecto a la apertura inmediata a los turistas británicos, creen que quedan pasos por dar. “El anuncio tiene la mitad de valor, toda vez que el Reino Unido sigue considerando a España como un destino no seguro, por lo que somete a los viajeros a dos test PCR y a una cuarentena a su llegada”, ha aseverado el presidente de la Federación de Empresarios de Hostelería y Turismo de Las Palmas, José María Mañaricúa. “A Canarias vienen turistas de clase media, y el coste de estas pruebas para una familia normal puede ascender a 700 o 800 libras [813 o 926 euros], algo inasumible”, argumenta.

El Reino Unido es el principal mercado emisor de turistas para Canarias. En 2019, sus visitantes supusieron el 37% del total de llegados a las islas. Alemania, por su parte, aporta algo más del 19% de viajeros. Esta última nacionalidad está también en el radar de los hoteleros canarios, que esperan que su afluencia crezca en cuando avance la vacunación. “El problema radica en que el rango de edad en torno a los 40 y 50, al igual que lo que sucede en España, no está vacunado todavía, con lo que el certificado de vacunación, probablemente, no lo tengan hasta julio”, sostiene Mañaricúa.

El presidente de la Confederación Española de Hoteles y Alojamientos Turísticos (CEHAT), Jorge Marichal, ha mostrado su satisfacción por el anuncio pero ha criticado que el acuerdo para la concreción y puesta en marcha del certificado digital covid “se tendría que haber resuelto mucho antes”. En similares términos se ha pronunciado el presidente de la Confederación Canaria de Empresarios, Agustín Manrique de Lara. “El tejido empresarial está en Canarias a disposición de las administraciones públicas para acelerar la vacunación y el cribado, y fomentar la responsabilidad social con el objetivo de acelerar y consolidar la recuperación de la actividad económica”.

Con información de Nacho Sánchez, Rafa Burgos, Lucía Bohórquez, Guillermo Vega y Alfonso Congostrina.