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Gibraltar confina a su población y la Junta cierra ocho localidades limítrofes por la expansión de la cepa británica

El Peñón sufre una incidencia siete veces superior a la española, con más de 2.000 casos por cada 100.000 habitantes

Javier Martín-Arroyo
Colas en el exterior de un supermercado de Gibraltar a causa de las restricciones por la pandemia, en una imagen de este sábado.
Colas en el exterior de un supermercado de Gibraltar a causa de las restricciones por la pandemia, en una imagen de este sábado.PACO PUENTES (EL PAÍS)

Gibraltar ha decretado el confinamiento domiciliario de sus 34.000 vecinos ante la expansión del coronavirus, que según la Junta de Andalucía mantiene 973 contagios activos y una incidencia acumulada superior a 2.000 casos por cada 100.000 habitantes, siete veces superior a la española (280). La Junta ha detectado casos de la nueva cepa británica y cerró ayer las ocho localidades limítrofes para intentar frenar al virus. Los gibraltareños no podrán salir de casa salvo para trabajar, comprar o hacer deporte las próximas dos semanas. “Seamos claros: esta es una orden de permanecer en casa, no es algo que hagamos a la ligera”, enfatizó ayer Fabian Picardo, ministro principal del Peñón.

La nueva variante del coronavirus detectada en Inglaterra es la causante de esta rápida expansión en la provincia de Cádiz, según la Junta andaluza. “La cepa británica es la cepa predominante en el Peñón (…) Tenemos que hacer un muro de contención ante la cepa británica y evitar que no se extienda de forma brusca al resto de Andalucía”, ha afirmado este sábado el consejero andaluz de Salud, Jesús Aguirre.

Gibraltar tenía hace solo dos semanas 60 casos activos y ahora se acerca al millar, con una incidencia acumulada 14 veces mayor que la registrada en Andalucía (140 casos por cada 100.000 habitantes). “El comportamiento del virus con una infecciosidad tan masiva sugiere que estamos viendo a la nueva variante más infecciosa en juego aquí, pero no podemos confirmarlo genéticamente”, ha añadido Picardo. El número de reproducción del virus en Gibraltar es 1,5, una cifra que denota su descontrol. En otras palabras, cada dos contagiados transmiten el virus a tres personas.

La rápida expansión del virus ha provocado que las cirugías de día hayan sido canceladas en el Hospital Sant Bernard del Peñón, que ha tenido que abrir su segunda unidad de cuidados intensivos tras llenarse la primera con cinco pacientes. En dicho hospital hay numerosos profesionales sanitarios contagiados, según el Gobierno llanito. Mientras, los comercios y restaurantes permanecen cerrados, salvo para pedir comida por encargo.

La vacunación en la Roca comenzará dentro de una semana, cuando llegarán 5.000 dosis con las que vacunará a ese mismo número de personas, en lugar de dos pinchazos por vacunado (con un lapso de 21 días), como recomienda Pfizer. “Con una estrategia de una dosis podremos cubrir a todos o casi todos nuestros vulnerables y ancianos con las primeras 5.000 dosis que lleguen a Gibraltar. Una sexta parte de nuestra población puede ser cubierta en muy poco tiempo”, ha explicado Picardo, informa Jesús A. Cañas.

En paralelo, la Junta de Andalucía ha ordenado el cierre perimetral de los ocho municipios limítrofes del Campo de Gibraltar, que suman 300.000 habitantes, para intentar frenar la expansión de la cepa británica, identificada en los análisis realizados en el Hospital Virgen del Rocío de Sevilla. La incidencia del patógeno en las localidades que rodean al Peñón se eleva a los 316 casos por cada 100.000 habitantes, más del doble de la media andaluza, con 140 casos. Desde este sábado los vecinos no podrán abandonar La Línea de la Concepción, Algeciras, Los Barrios, Castellar de la Frontera, Jimena de la Frontera, San Martín del Tesorillo, San Roque y Tarifa, salvo por causas justificadas. Este sábado la Junta ha realizado un cribado en La Línea que ha concluido con 15 positivos de un total de 489 personas, un 3% de la población testada.

La Junta ha reclamado al Gobierno que incremente el control en la Verja con Gibraltar para evitar que la cepa británica se extienda por toda la comunidad. “El Gobierno tiene que evitar que la entrada de la nueva cepa por Gibraltar desencadene una tercera ola en Andalucía y en España”, ha dicho el portavoz de la Junta, Elías Bendodo. El Ejecutivo autonómico reclama al central “un cortafuegos” con refuerzo de los controles sanitarios: “Gibraltar no puede ser una puerta trasera para la entrada en España de la nueva cepa importada de Gran Bretaña porque nos estamos jugando una tercera ola”, ha insistido Bendodo. Mientras, para la delegada del Gobierno en Andalucía, Sandra García, la Junta debería haber ordenado el cierre perimetral de los ocho municipios “con mucha más antelación”.

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Sobre la firma

Javier Martín-Arroyo
Es redactor especializado en temas sociales (medio ambiente, educación y sanidad). Comenzó en EL PAÍS en 2006 como corresponsal en Marbella y Granada, y más tarde en Sevilla cubrió información de tribunales. Antes trabajó en Cadena Ser y en la promoción cinematográfica. Es licenciado en Periodismo por la Universidad de Sevilla y máster de EL PAÍS.

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