Mueren dos personas más por el brote de legionela en Sabadell

El brote de legionela detectado el pasado lunes en Sabadell (Vallès Occidental) se cobró ayer la vida de otras dos personas, y ya van cuatro los muertos por esta enfermedad en la ciudad catalana. La Generalitat confirmó ayer que los últimos dos fallecidos tenían 84 y 86 años y ambos padecían “una patología de base muy grave”.

La Agencia de Salud Pública de Cataluña (ASPCAT) también elevó ayer a 28 el número de personas contagiadas, tras diagnosticar cinco nuevos casos en las últimas 24 horas. Aparte de los cuatro decesos, otras cuatro personas han sido dadas de alta y 20 continúan ingresadas en tres hospitales de los alrededores: en el Parc Taulí de Sabadell permanecen 14 personas, dos en la Clínica del Vallès y cuatro en el Hospital General de Catalunya.

Los últimos enfermos detectados son cinco hombres de edades comprendidas entre los 48 y los 86 años y, al igual que el resto de las personas contagiadas, se trata de pacientes con patologías de base previa "grave o muy grave", como son el cáncer, las insuficiencias cardíacas o respiratorias, tabaquismo u obesidad.

"Todos los afectados están ingresados en hospitalización convencional y no precisan cuidados intensivos", detalló la doctora Josefa Rivera, portavoz del hospital Parc Taulí de Sabadell, donde se encuentran ingresados la mayoría de los afectados. Rivera aseguró que el pronóstico depende de las patologías de base, pero no se prevé ninguna muerte inminente. "Hay algún paciente que está en situación grave, pero estable. No esperamos ningún fallecimiento en las próximas horas, pero puede pasar".

El Departamento de Salud, por su parte, se afana en localizar el foco de contagio, todavía desconocido. Los responsables de Salud Pública mantienen la hipótesis de que se trata de un "foco único" en la ciudad de Sabadell. Debido al "volumen de expansión", la sospecha se centra en alguna torre de refrigeración con "una potencia importante" para propagarse con rapidez. Con todo, debido a la virulencia del brote, la Generalitat ha reforzado las acciones de vigilancia epidemiológica e investigación ambiental. "El lunes y el martes revisamos y limpiamos 38 torres de refrigeración de 21 instalaciones consideradas de alto riesgo [como conductos de ventilación de edificios altos y de grandes dimensiones], pero ahora ya se están mirando también instalaciones de bajo riesgo [como pequeñas fuentes ornamentales o aspersores]", explicó Mireia Jané, subdirectora de Vigilancia y Respuesta a Emergencias de Salut Pública de la Generalitat.

Pese a mostrar "tranquilidad" al tener "controlados los focos sospechosos", el Departamento de Salud no descarta que aparezcan nuevos casos, ya que el período de incubación de la enfermedad es de 10 días. De hecho, los primeros afectados desarrollaron la sintomatología a principios de mes, mientras que los últimos enfermos detectados iniciaron el cuadro neumónico propio de la legionelosis entre el día 12 y el 16.

Los responsables de Salud Pública reconocieron también que se trata de un brote de legionela “importante”, aunque acharon la letalidad de la enfermedad al tipo de pacientes que lo sufren. “Se trata de una infección respiratoria que se mantiene en el tiempo, por lo que hay peligro de que se produzca un fallo multiorgánico, con mayor riesgo para las personas mayores o con una morbilidad importante, como son muchos de estos casos”, explicó la portavoz del Parc Taulí.

Según los datos del Departamento, los brotes más agresivos registrados causaron también “tres o cuatro muertes”, aunque éste ha resultado el más letal en los últimos años. En lo que va de 2014, se detectaron ocho brotes en Cataluña, que dejaron una víctima mortal, también en Sabadell, antes del verano. En 2013, se contabilizaron 13 brotes con 55 casos y una muerte.

La Generalitat también aprovechó ayer para salir al paso de las voces, como las asociaciones vecinales de Sabadell, que han puesto en duda los protocolos de prevención y la normativa que obliga a vigilar y revisar posibles focos de cultivo de legionela. Jané aseguró que todas las instalaciones inspeccionadas estaban desinfectadas y cumplían con los controles de seguridad.

Con todo, la doctora Jané llamó a la calma y, aunque no desveló las zonas sospechosas “para no crear alarma”, confirmó que, a partir del lunes, Salud Pública tendrá los resultados de los primeros cultivos realizados en las torres de refrigeración revisadas.