Revolución en la parrilla de la SER

No es un simple movimiento de fichas. Es toda una revolución radiofónica. La cadena SER ha diseñado el esqueleto de la parrilla de la nueva temporada, que incluye la incorporación de la periodista de Televisión Española Pepa Bueno al magacín matinal Hoy por hoy, donde compartirá micrófono con Gemma Nierga, que deja La ventana en manos de Carles Francino. Estos cambios encadenados afectan también al fin de semana, donde Javier del Pino pilotará A vivir que son dos días.

Pepa Bueno, editora y presentadora del Telediario-2 de TVE desde 2009, regresa a la radio para hacerse cargo del programa líder de todo el dial, con 2.854.000 oyentes, según la primera oleada de este año del Estudio General del Medios (EMG). No lo hará sola. Compartirá micrófono con Gemma Nierga, que en los últimos 15 años ha estado al frente de La ventana, un espacio imbatible en las tardes radiofónicas, con 831.000 seguidores diarios.

Ambas periodistas, que ayer se lanzaron en antena elogios mutuos, asumirán tareas diferenciadas y complementarias. En este nuevo tándem, Bueno se dará el gran madrugón para hacerse cargo del primer tramo (de 6.00 a 10.00), el más informativo, el que pone énfasis en la noticia pura y da cobijio a la tertulia de actualidad política. Nierga tomará el mando en un segundo bloque, el de mayor entretenimiento, participación de los oyentes e interactividad, que se prolongará hasta pasado el mediodía.

Con este movimiento, la cadena SER coloca a dos mujeres al frente del gran magacín matinal, una apuesta insólita en la radio privada. "Es un cambio sin precedentes" en el programa que creó Iñaki Gabilondo en 1986, subraya la emisora.

El próximo 3 de septiembre, con el comienzo de la temporada 2012-2013, las tardes tendrán otro sonido. Carles Francino, que los últimos siete años ha conducido Hoy por Hoy, abrirá La ventana. Defensor de una "radio coral", el periodista catalán dijo ayer que los cambios refuerzan la marca de equipo. Será, dijo, una Ventana ampliada, que se prolongará desde las 16.00 hasta las 20.00. Una hora más en la que, según la SER, tendrá cabida la información local y regional. "Las desconexiones no van a desaparecer", asegura de manera rotunda la cadena propiedad del grupo PRISA (editor de EL PAÍS).

Otro de los grandes cambios se producirá en el fin de semana. La marcha de Monserrat Domínguez (nombrada directora de El Huffington Post hace pocas semanas) de A vivir que son dos días sitúa al frente de este magacín a Javier del Pino, corresponsal de la cadena en Washington desde hace 15 años. "No reconoceré España. Cuando me fui no había ni móviles", ironizó ayer el periodista desde el otro lado del Atlántico.

La SER afronta estos cambios para crecer en un mercado cada vez más competido. Su director general, Alejandro Nieto, recordó ayer que la radio "no es un ente estático" sino "un cuerpo que tiene vida". Y apuntó que la SER tiene que acometer su propia transformación desde su posición de liderazgo. "Hay que hacer los cambios cuando las cosas van bien". Nieto aseguró que este es un "proyecto total", que ha sido diseñado para los próximos 15 años.

Fuentes de la SER aseguran que esta parrilla es "muy competitiva" y tiene un "menor coste" que la actual, ya que la emisora ha rebajado los sueldos de sus estrellas de común acuerdo. En los próximos meses se engrasarán los equipos y se definirán los colaboradores para que todo esté a punto para el nuevo curso.

El resto del esqueleto se apoyará en los grandes formatos informativos y deportivos, como Hora 14, Hora 25, El Larguero o Carrusel deportivo, que el año pasado vivió su propia transformación con la llegada de Manu Carreño y Juan Antonio Ponseti.

Todos estos espacios han contribuido a hacer de la SER la emisora más escuchada de la radio española, con más de cuatro millones de oyentes diarios, en la que todos sus programas son líderes. La nueva parrilla se adaptará a los hábitos de la audiencia en un sector cuyos pilares han sido los grandes magacines matinales. Desde su nacimiento, estos formatos han ido ampliando su duración para así ganar terreno en los estudios de audiencia.