Euskadi rechaza la propuesta de La Rioja para solucionar el conflicto sanitario

Las consejerías de Sanidad de Euskadi y La Rioja siguen sin entenderse para solucionar el conflicto sanitario que afecta a unos 5.000 vecinos de la Rioja Alavesa. Las propuestas de cada parte no han gustado a la otra parte, a tenor de los resultados. Si Euskadi envió las suyas a La Rioja el jueves, un día después los riojanos hicieron llegar su planteamiento, diametralmente diferente.

Portavoces de Osakidetza explicaron ayer que la propuesta riojana "no es satisfactoria" por varias razones. La principal es que el planteamiento "no garantiza la asistencia especializada" en todos los casos. De hecho, aseguraron a EL PAÍS que algunas de las especialidades "más demandadas" quedarían fuera de la propuesta de La Rioja: Dermatología, Oftalmología, Otorrinolaringología y Traumatología. En estos casos, los pacientes de la Rioja Alavesa tendrían que desplazarse irremediablemente al hospital vasco más cercano, el Universitario de Álava, en Vitoria, como hacen ahora hasta que el conflicto se solucione.

Además, la propuesta riojana mantiene de forma velada la idea, rechazada con contundencia por el consejero vasco, Rafael Bengoa, de recibir una contraprestación económica. Eso sí, la formula de otra manera: fijar un pago por atender a los pacientes alaveses solo si La Rioja perdiera dinero al valorar la atención de pacientes de cada comunidad en el territorio vecino.

El presidente de La Rioja, Pedro Sanz, del PP, apuntó el pasado fin de semana que Euskadi debe pagar por que sus pacientes de zonas limítrofes sean atendidos en Logroño. Ayer, sus portavoces rechazaron comentar la propuesta vasca, que no recoge esa posibilidad y plantea mejorar el acceso a los servicios sanitarios que Euskadi ya presta a los riojanos —neurocirugía, apoyo en trasplantes renales, algunas cirugías pediátricas—, entre otras mejoras.

Los contactos continúan entre los directores de ambos servicios de salud, Julián Pérez Gil por Osakidetza y Javier Aparicio del lado riojano, aunque hoy por hoy, y a dos días de que venza el plazo establecido para tratar de alcanzar un acuerdo —el 1 de diciembre— ambas propuestas resultan "imposibles de casar", lamentan fuentes vascas.