_
_
_
_

La Fiscalía denuncia al gurú hinduista de Granada por uso "sistemático de técnicas de persuasión coercitiva"

Unos ex afiliados afirmaron que la organización era sectaria y obligaba a firmar "contratos de exclavitud"

La Fiscalía de Granada ha decidido interponer denuncia contra Antonio Javier Plazas, el supuesto gurú de la comunidad hinduista de la rama védica Vadika Pratisthana Sangha por hacer un uso "sistemático de técnicas de persuasión coercitiva", "engañando y presionando psicológicmente" a los integrantes de su congregación.

El fiscal, tras una investigación iniciada en verano,le atribuye un delito de asociación ilícita y tantos delitos contra la integridad moral como personas afectadas, que podrían ser una veintena de toda España.

El Ministerio Público considera que, desde que se fundó la comunidad, a principios de los años ochenta, el denunciado "de manera personal y valiéndose de aquellas personas que componen la estructura jerarquizada" de la congreación, "ha venido llevando a cabo actos consistentes en la captación de personas en satisfacción de sus intereses personales", según consta en el decreto que el fiscal ha hecho público este miércoles, al que ha tenido acceso Europa Press.

Más información
Investigado un grupo hindú por esclavizar a sus fieles
¿Secta o persecución?
Clases de yoga como reclamo

Utilizando como "reclamo" el atractivo de la religión y la cultura hinduista y aprovechando en ocasiones la "debilidad" de quien acudía a ellas por problemas familiares, laborales, psicológicos e incluso físicos, el líder, aplicaba técnicas abusivas y coercitivas en el grupo, tales como permitirles tan sólo una comida al día, tres o cuatro horas únicamente de sueño, deberes y responsabilidades "constantes", incluso con "contratos de esclavitud".

Como en todos los casos de esta índole, hay dos versiones. La comunidad hinduista de Granada Vadika Pratisthana Sangha,acusada de "esclavizar" a jóvenes y someter sexualmente a las mujeres que pertenecen a ella,atribuyen la denuncia a una "persecución religiosa" y a una "campaña de difamación". Las familias de varias ex adeptas, todas mayores de edad, pusieron los hechos en conocimiento del Defensor del Ciudadano, Melchor Sáiz-Pardo, que trasladó la información a la Fiscalía.

Tara Shakti, a la izquierda, y Shiva Shankara, durante su comparecencia para dar su versión sobre los hechos denunciados.
Tara Shakti, a la izquierda, y Shiva Shankara, durante su comparecencia para dar su versión sobre los hechos denunciados.EFE

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_