La nueva escuela de idiomas de Valencia acumula casi tres años de retraso

La nueva escuela oficial de idiomas ya tiene cara, aunque aún no se ha puesto un ladrillo para levantarla. El Ayuntamiento de Valencia ha concedido hoy la licencia de obras del nuevo centro y ha mostrado un boceto del edificio. La escuela, que se levantará sobre una superficie de 8.200 metros cuadrados en el distrito de Quatre Carreres, acumula ya un retraso de casi tres años en la tramitación, ya que el proyecto debería haberse licitado en diciembre de 2007. El consistorio, además, no cedió la parcela necesaria hasta noviembre de 2008. La Generalitat es la responsable de la construcción. La oposición socialista en el Ayuntamiento asegura que el anuncio de la licencia de obras "es puro humo" para aparentar que el proyecto avanza.

El nuevo centro beneficiará a unos 10.500 estudiantes. Un número parecido de aspirantes se ha quedado sin clases este año por falta de espacio en la escuela actual. Una vez completada la oferta con el nuevo centro, Valencia dará cobertura a más de 20.000 alumnos.

El grupo socialista, que encabeza Carmen Alborch, critica desde hace tiempo el retraso de la Generalitat en levantar el edificio. Las obras tenían que haberse adjudicado hace más de dos años para que la primera promoción de la nueva escuela hubiera entrado este curso. De momento, el Ayuntamiento ha dado licencia para que las obras empiecen y la Generalitat ha aceptado la parcela que le ha cedido a su vez el Consistorio. Los socialistas aseguran que tanto el Consell como el gobierno local solo venden humo. Si tuviesen verdadero interés, aseguran, licitarían las obras y las adjudicarían enseguida, pero no hay dinero ni para construirla, ni para pagar al profesorado o el mobiliario.