Las tripas de un documental
Los directores Lluis Escartín y Elías León participan en un taller de la UPV - La obra de los autores se caracteriza por la "exploración"
Pueden parecer dos tipos raros, excéntricos y estandartes de una modernidad excesiva. Pero lo cierto es que Lluis Escartín (Barcelona, 1966) y Elías León (San Sebastián, 1971) con trabajo y persistencia han conseguido hacerse un hueco en el panorama del cine documental. Algo más que difícil teniendo en cuenta que tratan un género alejado de los circuitos comerciales y con un sello tan personalísimo que pueden pecar de elitistas. Los dos creadores han participado esta semana en un curso organizado por la UPV sobre documental contemporáneo, en Bilbao
Tanto el trabajo de Escartín como el de León dista mucho del documental al uso o el de otros directores que han conseguido popularizar el género como Michael Moore. Lo de estos autores está más cerca de la vanguardia, de la experimentación, o "mejor dicho exploración", como apunta Escartín. Con Texas Sunrise, uno de sus trabajos más afamados, el director catalán, entremezcla el monólogo en off de un vagabundo con imágenes de la costa oeste de Estados Unidos. "Puede parecer muy complejo pero cuando mis trabajos se han exhibido en lugares tan poco sofisticados artísticamente como es mi pueblo, Vilafranca del Penedès, el público en general goza. Es sorprendente porque no es una disciplina contemporánea en la que necesites leerte 25.000 libros para poder decir guau, qué bonito es esto", explica Escartín.
"No necesitas leerte 25.000 libros para decir que bonito es", asegura Escartín
Los creadores recomiendan a los jóvenes "paciencia y humildad"
Con el objetivo de entender su lugar en el mundo a través de una cámara y a sí mismo, León emprendió, mientras estudiaba Dirección Cinematográfica en Nueva York, la serie Conceptos clave del mundo moderno, un compendio de microdocumentales con los que ha conseguido un amplio reconocimiento internacional. Para él su trabajo no es más que "un reflejo de la complejidad de la realidad contemporánea, más que seguir una visión política o sociológica del mundo concreta", sostiene.
Los dos además son expertos en autoproducción y autofinanciación, por una razón muy sencilla según Escartín; "porque somos españoles, si fuésemos franceses con el trabajo acumulado que llevamos tendríamos casi automáticamente una subvención, una ayuda y una distribución". León no es tan tajante y reconoce que para optar a una ayuda con el trabajo que realizan "habría que hacer el paripé de escribir un guión que luego no sería real para que alguien diga esto merece o no merece la pena. Son las dificultades que tiene el cine de no ficción, el que se encuentra, el que no se prepara".
Aún así, recomiendan a todos aquellos que les quieran emular "paciencia y humildad" o citando a Ken Jacobs, un videocreador padre de la experimentación, "get lost" (piérdete) y ¿luego?, "get lost agian" (piérdete otra vez). "Perderse con la cámara y el montaje", puntualiza Escartín.
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