Los bomberos de Horta abroncan a los políticos

Los diputados que asisten a la comisión de investigación del incendio de Horta de Sant Joan se han llevado esta mañana una severa reprimenda. Los compañeros y los jefes de los cinco bomberos fallecidos en el incendio el pasado mes de julio acusaron a los políticos de saltarse "todas las fronteras del respeto y la dignidad" por motivos electorales.

Uno de los jefes de los Graf (los bomberos de élite de la Generalitat) que trabajó en la extinción, Ricardo Expósito, ha acusado a los grupos de filtrar a los medios de comunicación las comunicaciones entre los efectivos en el momento de la tragedia. En un discurso inicial lleno de ironía, Expósito ha asegurado que está colaborando para extinguir "el incendio elecciones 2010" y que los bomberos "no están acostumbrados a trabajar con un fuego mediático y político".

El jefe de los Graf, Marc Castellnou, ha negado indignado que hubiera relajación entre los bomberos y ha pedido una reflexión por si deben asumirse tantos riesgos. "El bosque siempre vuelve a crecer, pero a mis compañeros no me los devolverá nadie".

La mañana en la comisión se ha iniciado con una queja. Antes de inciarse la sesión, el diputado del PP Rafael Luna ha presentado una queja formal por la presencia en la sala de la directora general de Prevención, Extinción de Incendios y Salvamentos, Olga Lanau. Tal y como ya dijo la semana pasada, Luna cree que su presencia puede "condicionar la libertad" en la declaración de los comparecientes.

El presidente de la comisión, Higini Clotas, ha dicho que todos los citados, así como diputados y periodistas acreditados tienen derecho a seguir las sesiones, por lo que a Lanau le asisten todos los derechos en tanto que compareciente.

Para hoy también está prevista la comparecencia del que daba las órdenes a los Graf de Lleida durante la extinción (Graf 01), Moisés Galán, que hacía de jefe de guardia de apoyo desde el centro de mando de Bellaterra (Barcelona). Andreu Caravaca, vigilante de los Graf de Lleida, que tuvo que cambiar de posición ante el avance de las llamas, también declarará en la comisión.

También intervendrá el jefe de los Graf de Barcelona. Los efectivos de este grupo fueron los primeros en auxiliar a las víctimas del Graf Lleida porque trabajaban a unos 200 metros del cerco mortal. En la comparecencia de hoy participará también el jefe del Graf de Tarragona y coordinador de las unidades de los grupos de refuerzo de actuaciones forestales (Graf 06), Ricard Expósito.

Mañana declarará el subinspector jefe de la División de Grupos Operativos Especiales de los Bomberos, Sebastià Massagué, que no estaba operativo el día del incendio y que tras la muerte de los bomberos se desplazó hasta Horta junto al entonces jefe de los Bomberos, Antoni Rifà. Mientras Rifà fue a informar a las familias, Massagué tomó el mando del centro avanzado de Horta.

También intervendrán el jefe de la región de emergencias de Tarragona, Agustí Gatell; el jefe de los bomberos voluntarios de Horta, Vicent Creus; el jefe del flanco derecho del incendio, el sargento Juan José Muria, y el jefe del flanco izquierdo, el sargento Enric Ramírez, así como un experto de los bomberos franceses, Nicolás Coste.

En las primeras dos sesiones de comparecencias intervinieron en la comisión responsables de Agentes Rurales, vecinos de Horta y el jefe de la región de emergencias de Terres de l'Ebre de los Bomberos, Fèlix González.

El vigía de los Graf, Andreu Caravaca, ha denunciado la "falta de educación y de sensibilidad" sobre la tragedia. "No queremos que parezca una serie de televisión", ha asegurado Caravaca en alusión a la difusión de imágenes de la tragedia. "Todo sucedió de forma muy rápida y hubo factores meteorológicos excepcionales".

En una línea similar se ha expresado el sargento que estuvo al mando de los Graf Barcelona en el incendio, Juan Herrera. "La morbosidad de ciertos vídeos y cortes de voz nos hacen daño, y también a las familias de las víctimas". Herrera ha añadido que en la tragedia confluyeron "distintas circunstancias" y rechazó que se produjera una "cadena de errores". El sargento fue muy crítico, sin embargo, con las brigadas de refuerzo (Brif) del Ministerio de Medio Ambiente. Éstos decidieron marcharse de la zona cuando vieron que la situación se complicó. Al decidir ser evacuados, los Brif "distorsionaron totalmente la línea de trabajo" y "provocaron una gran desorganización". A juicio de Herrera, los Brif "salvaron la vida porque otros pusieron la suya en riesgo".