El Rey elogia el buen periodismo que favorece la paz y el derecho internacional

El Rey ha elogiado el buen periodismo, que favorece un futuro de paz, el rechazo a la violencia y la discriminación, un desarrollo solidario y sostenible y el respeto al derecho internacional.

Don Juan Carlos se ha expresado así en el discurso de clausura de la ceremonia de entrega de los Premios Internacionales de Periodismo Rey de España 2008, galardones que en esta XXVI edición reconocen trabajos de investigación y denuncia social y han recaído en periodistas de Brasil, Chile, España, Colombia y México.

Los galardones, que convoca anualmente la Agencia EFE y la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AECID), han sido entregados en la Casa de América de Madrid junto al Premio Don Quijote de Periodismo que patrocina la Junta de Castilla-La Mancha y que este año celebra su V edición.

El Rey, que ha presidido el acto acompañado por la Reina, ha indicado que los galardonados son exponentes destacados del derecho a la información y a la libertad de expresión y representan "una defensa del ejercicio del periodismo, profesión siempre ardua y compleja, a menudo arriesgada, sometida en estos tiempos a los retos que entrañan las nuevas tecnologías".

Don Juan Carlos ha defendido un periodismo que persiga logros como "un futuro de mayor paz, bienestar e igualdad de oportunidades; la protección de los derechos fundamentales y libertades públicas -que refuerzan nuestras democracias-; el rechazo a la violencia y a toda discriminación; el avance hacia un desarrollo más solidario y sostenible o el respeto al derecho internacional".

El Monarca ha señalado asimismo que estos premios son una nueva ocasión de encuentro entre los pueblos iberoamericanos y de otros países, como Filipinas, Guinea Ecuatorial, Israel o Marruecos que, "históricamente, han utilizado el español como instrumento de comunicación".

Ha concluido su discurso animando a la Agencia EFE a continuar con estos premios, que promueven y ensalzan la excelencia que "día a día acrecienta el prestigio del gran mundo iberoamericano de la comunicación".

El Premio Iberoamericano ha recaído este año en el español Mikel Urretavizcaya por El secreto de Urdaneta, un documental sobre el navegante Andrés de Urdaneta.

El periodista chileno Amaro Gómez-Pablos B. ha recogido el Premio de Televisión por Guantánamo, acceso exclusivo a la cárcel más controvertida, y las mexicanas Jade Ramírez Cuevas Villanueva y Priscila Hernández Flores el de Radio por La discriminación viaja por Avianca.

El español Gervasio Sánchez ha obtenido el Premio de Fotografía por una instantánea de la serie Vidas minadas, 10 años después, sobre el drama de los mutilados por las minas antipersonales.

El reportaje Política do terror, sobre las milicias que controlan las favelas de Río de Janeiro, ha logrado el premio de Prensa para la autora de este trabajo y sus colaboradores del diario brasileño O Dia, secuestrados y torturados durante su elaboración.

Paola Andrea Villamarín y su equipo han sido distinguidos en Periodismo Digital por 10 historias inéditas en la cultura colombiana.

Por su parte, el Premio Don Quijote de Periodismo lo ha recibido el colombiano Julián Orlando Isaza Niño por Atlas es chocoano, un trabajo sobre los que se dedican a llevar sobre sus hombros objetos y personas en la selva.