Los padres de Maddie acuden a Madrid ante la posibilidad de que la niña esté en España
El ministro del Interior recibe a Gerry y Kate McCann, que buscan a su hija desde el pasado 3 de mayo
Los padres de Madeleine McCann, la niña británica que desapareció hace ya casi un mes en el sur de Portugal, han hecho un llamamiento a la cooperación policial "paneuropea" en la búsqueda de su hija, y han pedido la colaboración de los españoles, ante la posibilidad de que la niña se encuentre en España.
Gerry y Kate McCann han trasladado a Madrid la campaña de búsqueda de la pequeña, que incluye numerosos carteles de "se busca" que serán distribuidos en "zonas de alta visibilidad" como estaciones de metro y autoús u oficinas de correos" y la publicidad de su página web findmadeleine.com.
En su comparecencia ante los medios, y con la presencia de representantes de la Embajada británica, Gerry McCann ha considerado la posibilidad de que la pequeña pueda encontrarse en España. Ante esta situación, McCann ha solicitado la ayuda "de los españoles" como "apoyo a la investigación criminal" que se está llevando a cabo para descubrir el paradero de la pequeña. "Es probable que alguien del público español tenga información sobre quién podría haber secuestrado a nuestra hija", ha dicho el padre.
Madeleine, que cumplió cuatro años el sábado, desapareció el 3 de mayo del cuarto del aparta-hotel en el que dormía con sus hermanos mellizos, mientras sus padres cenaban en un restaurante cercano. La policía portuguesa desplegó un dispositivo sin precedentes para encontrar a la pequeña.
Al término de la declaración inicial realizada por su marido, Kate McCann, visiblemente afectada y sujetando en todo momento la mano de su esposo, ha limitado su intervención a explicar el efecto de la desaparición en la vida de los otros dos niños de la pareja, Sean y Amelie, mellizos de dos años, que "pasan mucho tiempo juntos, saben que falta algo en su vida, saben que no está su hermana" pero por su corta edad "no entienden la trascendencia del suceso".
En relación a la actividad desarrollada por las fuerzas de seguidad en la búsqueda de Madeleine, Gerry McCann ha señalado que "las desapariciones deberían ser tratadas de una forma paneuropea, como cualquier otro tipo de desplazamiento de individuos a nivel internacional", al tiempo que ha agradecido "la labor realizada por el Defensor del Menor de la Comunidad de Madrid" para publicar las imágenes de la niña y poner en conocimiento su desaparición mediante los canales habituales, que incluyen la estrecha cooperación entre la Europol y las policías portuguesas y española.
Un hombre de unos 35 años
La madre de Maddie también ha recordado que la última vez que la niña fue vista en público, en la playa de la Luz, iba acompañada de un hombre moreno, de unos 35 años, con chaqueta negra y pantalones claros, en torno al 1,70 m. de altura, una información que esperan contribuya a una "investigación proactiva" en España acerca de la desaparición de Madeleine y que hasta el momento no se había publicado en España, dada la escasa posibilidad de que "hubiera españoles en La Luz" en el momento de la desaparición de la niña.
"Valdría la pena explorar el hecho de que su desaparición no fuera un hecho aislado sino integrado dentro del contexto de otras desapariciones", ha dicho Gerry. "Estamos encantados de saber que lo que están haciendo es un esfuerzo continuado, con muchas pistas. Con todo eso, seguimos estando esperanzados y manteniéndonos positivos" acerca de un feliz desenlace, ha concluido el padre de Madeleine.
Después de la rueda de prensa, los McCann se ha reunido con el ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba.
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