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Los curas españoles se dicen solitarios, de derechas y en contra del celibato obligatorio

Un profesor universitario presenta la primera radiografía en cuatro décadas de los sacerdotes

Los sacerdotes diocesanos españoles "ya no viven como curas", se confiesan más bien de centro-derecha, están orgulloso de su vocación aunque no suelen vestir los ropajes propios de ésta, se sienten solos y, en general, preferirían que lo del celibato fuera una cuestión opcional. Así se desprende de la radiografía realizada a los curas españoles por un profesor de la Universidad Complutense de Madrid, que ha dirigido la primera encuesta sobre estos religiosos desde 1969.

Las conclusiones las ha presentado el profesor Luis Fernando Vílchez hoy en la sede de la Asociación de la Prensa de Madrid, y serán publicadas en la revista 21rs. Los curas se sienten queridos por la sociedad (uno de cada tres se cree "muy valorado", y dos de cada tres "bastante" bien valorado), y lo tienen claro: el 96,8% "optaría por ser sacerdote si naciera de nuevo".

Cuatro de cada diez curas no quiso definirse políticamente; del resto, tres de cada diez se definió de centro-derecha. Vílchez lo achaca a que "se confunde el no meterse en política con el no tener opinión política o no manifestarle, así como a un intento de situarse por encima del bien y el mal". Sin embargo, el 61,1% opina que el Ejecutivo de José Luis Rodriguez Zapatero es "anticlerical y laicista", frente al 24,8% que cree que "no actúa de forma diferente a los demás gobiernos de la democracia".

Dos de cada tres piensa que la Iglesia "debería autofinanciarse y renunciar a la financiación del Estado para ser más libre". Sobre su situación económica, siete de cada diez la consideran "suficiente, sin problemas". Y es que su mayor problema declarado es la soledad (37,2%), seguido de la afectividad (19,8%) y, en menor medida, el hecho de no tener hijos (7,2%) o la sexualidad (6,5%).

En esa línea, algo más de la mitad (52,7%) considera que el celibato sacerdotal debería ser opcional. El 58,7% aboga por cerrar el paso a las mujeres. Sólo el 1,1% usa sotana y cuatro de cada diez alzacuellos. El 30,8% es licenciado universitario y el 2,7% es doctor.

Según Vílchez, los curas jóvenes "son más espiritualistas y optan menos por el compromiso con los más necesitados", creen que la Iglesia tiene derecho a ser financiada por el Estado, no son partidarios del celibato opcional ni del sacerdocio de la mujer, se sitúan políticamente en el centro-derecha, van de sotana y son los que más solos se sienten afectivamente". El estudio también revela que los sacerdotes vascos y catalanes son más progresistas mientras que los madrileños más conservadores.

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