El quebrantahuesos regresa a los cielos de Cazorla

El último ejemplar de quebrantahuesos avistado en Andalucía fue en 1986 en Cazorla. Después de 20 años de ausencia, este buitre ha regresado hoy a los cielos andaluces con la primera suelta controlada de tres pollos que está llevando a cabo la Consejería de Medio Ambiente en la Sierra de Cazorla (Jaén), en el último enclave en el que se avistó esta especie en peligro inminente de extinción. Libertad, Tono y Faust son los nombres de los tres pollos, de entre 94 y 104 días, que hoy han sido liberados.

Se ha usado la técnica del hacking, una fórmula utilizada con éxito en el proyecto de reintroducción llevado a cabo en los Alpes, según ha explicado el director del Medio Natural, José Guirado. El hacking consiste en llevar los pollos con una edad de entre 90 y 100 días, cuando aún no han terminado de emplumar totalmente, a una cueva seleccionada en un cortado rocoso y con unas dimensiones suficientes para que los quebrantahuesos puedan disponer de espacio y así esquivar posibles agresiones entre ellos. De esta forma, los tres pollos elegidos dispondrán de una cueva de casi 10 metros de larga que ha sido dotada de cámaras que emiten a un campamento base situado en las proximidades.

El personal del proyecto observará a los pollos en turnos de 24 horas y estarán controlados durante los 25 ó 30 días que pasarán en el lugar de sueltas antes de que inicien sus primeros vuelos. Durante estos días se les suministra comida intentando siempre que no vean a los cuidadores. Para saber los movimientos que realizarán los quebrantahuesos una vez emprendan el vuelo, se les va a dotar del más moderno sistema de seguimiento mediante emisores GPS que emiten coordenadas UTM de las posiciones de las aves. Además de este sistema, los jóvenes quebrantahuesos - por el momento sólo se conoce el sexo de uno y es macho- llevarán decoloradas algunas plumas de las alas, lo que les confiere un diseño típico y único para cada ave.

Tres diseños alares

Con este sistema, según Guirado, se pretende "incentivar la participación ciudadana en la identificación de las aves y localización de sus movimientos" y para ello se elaborarán unas fichas con los tres diseños alares de las aves que serán repartidas entre los habitantes y visitantes del Parque natural de las sierras de Cazorla, Segura y Las Villas. Actualmente en el centro de cría del Guadalentín, en pleno corazón del Parque Natural, se cuenta con 27 ejemplares de diferentes edades y sexos: 13 machos, 13 hembras y un pollo nacido en 2006. De ellos sólo seis aves -tres parejas- han alcanzado la madurez sexual y se encuentran en formación otras cuatro parejas más que pudieran incorporarse a la reproducción en la próxima temporada.

El Centro de cría Guadalentín funciona en red con todos los Centros europeos de la especie y a final de la temporada reproductora se hace inventario de todos los pollos nacidos en cautividad. Aquellos que constituyen líneas genéticas nuevas son mantenidos en cautividad en un Centro distinto a donde se encuentren los progenitores y las líneas genéticas repetidas en cautividad son liberados en los diferentes puntos de suelta. Actualmente hay puntos de suelta en Austria, Francia, Suiza e Italia y el próximo año se incorporará Andalucía.

La primera suelta de pollos estaba prevista para la primavera de 2005, pero se retrasó por recomendación de los técnicos por el riesgo que había de envenenamiento ante la imposibilidad de controlar el uso de venenos en la zona elegida para su suelta. La Consejería de Medio Ambiente lleva invertidos más de 1,2 millones de euros en el programa de reintroducción del quebrantahuesos con el que se pretende dar continuidad a una especie de la que sólo hay 30 ejemplares registrados en España. Al año, la Junta destina 240.404 euros al programa, a lo que suma el 1,6 millones correspondientes al programa europeo Life y a repartir entre 2005 y 2009. El último ejemplar de quebrantahuesos avistado en Andalucía fue en 1986 en Cazorla, de ahí que desde la Consejería se haya apostado por este espacio para su programa de reintroducción.